Maíz: el USDA proyecta un aumento en las exportaciones para 2024/25
A pesar de las incertidumbres climáticas y biológicas que amenazaban con impactar negativamente al maíz y a la producción agrícola en Argentina, las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) señalan que la oferta exportable de maíz del país sudamericano se mantendría estable e, incluso, podría aumentar en la campaña 2024/25. Según el último informe de la oficina del USDA en Buenos Aires, se estima una cosecha de maíz de 48 millones de toneladas para el próximo ciclo, una cifra ligeramente inferior a la previsión oficial del USDA de 51 millones, pero aún así prometedora dada la situación actual.
Perspectivas para la campaña 2024/25
La previsión del USDA en Buenos Aires coincide con estimaciones realizadas por la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que anticipa una cosecha cercana a los 47 millones de toneladas para 2024/25. Gracias a un importante stock inicial, la oferta total de maíz para la campaña 2024/25 no se vería afectada significativamente, y las exportaciones podrían alcanzar los 35 millones de toneladas, un incremento respecto a los 34 millones de la temporada anterior. Estos datos contrastan con el temor inicial que despertaron fenómenos climáticos adversos y la presencia de Spiroplasma, una bacteria que afectó algunos cultivos en la región y generó preocupación en el sector.
Factores que impulsan la oferta exportable
El informe firmado por el analista Kenneth Joseph sugiere que la capacidad de exportación de Argentina podría mantenerse sólida debido a un menor consumo interno proyectado para el ciclo 2024/25, estimado en 14,5 millones de toneladas, una reducción del 11% frente a la proyección original del USDA. Este ajuste en el consumo se debe a dos factores clave:
- Aumento en la producción de biocombustibles: La mayor disponibilidad de sorgo y de subproductos del maíz como la burlanda (DDGS) generados por la industria del bioetanol podrían desplazar parte del consumo de maíz en el mercado interno, lo cual fortalecería la oferta exportable.
- Recuperación en el sector de proteínas cárnicas: Si bien se prevé una recuperación en la producción de carne y otros sectores de proteínas en 2024, estos sectores siguen afectados por la recesión económica y un clima seco reciente. Esto podría limitar el repunte en la demanda de maíz en el país.
Preferencias de los productores en un contexto de alta oferta
La estrategia de los productores ante una buena cosecha parece inclinarse hacia la venta anticipada de maíz antes de que llegue la nueva cosecha en marzo de 2025. A la vez, el informe subraya que, para aquellos que decidan reservar granos, es más probable que opten por almacenar soja en lugar de maíz. Esta elección responde a la demanda constante y los mejores precios de la soja en el mercado, dado su rol fundamental en la industria aceitera.
Por otro lado, la posibilidad de sostener exportaciones elevadas puede dar un respiro a la economía argentina, que atraviesa dificultades significativas. El mercado internacional, especialmente China, mantiene una demanda constante de maíz argentino, aprovechando la competitividad del país en este segmento.
El USDA advierte sobre las dificultades para medir con precisión el consumo de maíz en Argentina debido a sus múltiples aplicaciones. El cereal se utiliza tanto para alimentación animal como para consumo humano, además de su participación en el mercado de biocombustibles, lo que genera variabilidad en la demanda.
Una mirada al futuro
La resiliencia de la industria del maíz en Argentina resulta clave para el desarrollo del sector agrícola y la estabilidad económica. Si bien los precios en el mercado interno y la incertidumbre climática plantean desafíos, la posibilidad de mantener una oferta exportable sólida en 2024/25 representa una oportunidad para el país. Además, las perspectivas de una recuperación en el sector de proteínas cárnicas y el crecimiento de la industria del bioetanol indican que la demanda de maíz podría estabilizarse, permitiendo a Argentina consolidar su posición en el mercado global.
Con una fuerte proyección de exportación para la nueva campaña, Argentina continúa siendo un jugador relevante en el mercado internacional de granos, aportando a la estabilidad económica del país y aprovechando oportunidades en el sector agrícola en medio de un contexto global de demanda creciente.