El 73% de la soja de segunda en Entre Ríos se encuentra en estado bueno a muy bueno
De acuerdo con el informe semanal de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, la soja de segunda abarca aproximadamente 600.000 hectáreas en el ciclo agrícola 2024/25. Actualmente, el cultivo se encuentra en la etapa vegetativa, con fenologías que varían entre V1 (un nudo en el tallo principal) y V6 (seis nudos en el tallo principal).
Estado de la soja en Entre Ríos
El informe detalla que, a nivel provincial, la condición de la soja de segunda se distribuye de la siguiente manera:
- Muy buena: 16%
- Buena: 57%
- Regular: 24%
- Mala: 3%
Esto significa que un 73% del área cultivada se encuentra en condiciones favorables, lo que es alentador para los productores de la región. Sin embargo, un 27% del área muestra condiciones regulares a malas, lo que refleja desafíos específicos en ciertas zonas.
La porción del área clasificada como regular a mala responde principalmente a problemas de implantación. Estos inconvenientes fueron consecuencia de excesos hídricos registrados durante la época de siembra, lo que dificultó el establecimiento uniforme de las plantas.
Además, al igual que la de primera, la soja de segunda enfrenta los efectos de la falta de precipitaciones de las últimas semanas. Las consecuencias de esta sequía incipiente comienzan a manifestarse en:
- Rajaduras en el suelo.
- Amarillamiento y caída de hojas en las plantas.
- Pérdida de plantas en suelos de menor calidad.
Si bien la situación general es positiva, el estado del cultivo podría deteriorarse si no se registran lluvias significativas en el corto plazo, especialmente en las áreas más afectadas por la falta de agua.
El informe refuerza la importancia de un monitoreo constante de los cultivos para anticipar decisiones de manejo que mitiguen el impacto de estas adversidades climáticas, especialmente en un contexto de creciente variabilidad climática que exige estrategias adaptativas en el sector agrícola.
La soja de segunda representa una parte fundamental de la producción en la provincia, y su desempeño es clave para la economía agrícola provincial. Las próximas semanas serán determinantes para definir el potencial de rendimiento en esta campaña.
