Senasa: el Gobierno elimina 61 resoluciones en una nueva etapa de desregulación
El Senasa se suma al proceso de desregulación del Estado impulsado por el Gobierno nacional avanzó con la eliminación de 61 resoluciones del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, según se informó este miércoles a través del Boletín Oficial. La medida busca reducir trámites administrativos y eliminar normativas consideradas obsoletas, en línea con la política de desburocratización promovida por la administración de Javier Milei.
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, celebró la decisión y elogió la labor de las autoridades del Senasa, encabezadas por Pablo Cortese. “Aplican la motosierra y podan 61 resoluciones eliminando trámites y obsolescencias”, expresó el funcionario, destacando la importancia de reducir la carga burocrática sobre los productores y empresas del sector agropecuario.
Entre las normativas derogadas, Sturzenegger puso especial énfasis en la Resolución 500/23, implementada durante la presidencia de Alberto Fernández y bajo la gestión de Diana Guillén en el Senasa. Dicha resolución obligaba a los productores a inscribirse en el Registro de Integridad y Transparencia para Empresas y Entidades (RITE), un requisito que el ministro calificó de innecesario y excesivamente burocrático. “Qué se le puede haber cruzado por la mente a la directora de Senasa de ese momento para obligar a nuestros productores a hacer este trámite, escapa mi capacidad de razonamiento o de imaginación”, ironizó Sturzenegger.
Las normativas eliminadas de Senasa
La lista de resoluciones derogadas incluye normativas que datan desde 1992 hasta la actualidad, abarcando distintos aspectos de la regulación sanitaria y agroalimentaria. Entre ellas, se encuentran las resoluciones 36/1992, 261/1994, 220/1996, 746/2004, 230/2006, 684/2007, 971/2009, 273/2010 y 332/2012, entre muchas otras. Además, fueron suprimidas disposiciones de la Dirección Nacional de Protección Vegetal, lo que implica un reordenamiento de las regulaciones en ese ámbito.
Desde la llegada de la nueva gestión a fines de 2023, el Senasa ha sido uno de los organismos donde más se ha avanzado en la eliminación de trámites considerados innecesarios. Según fuentes oficiales, el objetivo es simplificar la operatoria del sector agropecuario, agilizar procesos y favorecer la competitividad de los productores.
La eliminación de estas resoluciones se enmarca en la estrategia del Gobierno de reducir la intervención estatal en la economía. Desde el Ministerio de Desregulación afirman que estas medidas buscan facilitar la producción y el comercio agropecuario, disminuyendo costos asociados a gestiones administrativas.
Sin embargo, la desregulación también ha generado debates en algunos sectores que advierten sobre la necesidad de mantener ciertos controles para garantizar estándares sanitarios y de calidad en la producción agroindustrial. En ese sentido, algunos especialistas subrayan la importancia de evaluar con precisión qué normativas pueden ser eliminadas sin comprometer la seguridad alimentaria ni la competitividad en los mercados internacionales.
Mientras el Gobierno avanza con su agenda de reformas, el sector agropecuario sigue de cerca estos cambios, a la espera de cómo impactarán en la dinámica productiva y en la relación con los mercados externos. Con esta nueva “poda” en el Senasa, la administración Milei reafirma su compromiso con la desregulación como eje central de su política económica.
