Semillas de soja 2025: presentan una técnica innovadora para evaluar su vigor
En un avance significativo para la soja y la agricultura, especialistas del INTA Oliveros, en Santa Fe, han desarrollado y validado una nueva técnica de análisis conocida como la “prueba de emergencia de radícula” (ER), diseñada para medir el vigor de las semillas de soja de manera rápida y precisa. Esta herramienta es crucial para predecir la capacidad de implantación del cultivo, especialmente en condiciones adversas de campo.
En el sector agrícola, la velocidad de germinación es una de las cualidades más valoradas en las semillas. Un lote con alta germinación y rápida emergencia permite minimizar los riesgos asociados al ataque de patógenos e insectos del suelo, además de garantizar una implantación eficiente en los tiempos deseados por los productores.
Carina Gallo, investigadora del Laboratorio de Semillas del INTA Oliveros, explicó: “La germinación de los lotes comerciales suele ser alta, pero en condiciones de campo desfavorables, las diferencias en el vigor de las semillas pueden afectar significativamente la emergencia.”
Esto subraya la necesidad de contar con herramientas específicas como la prueba ER, capaz de identificar y clasificar lotes de semillas según su vigor.
¿Qué es la prueba de emergencia de radícula?
La prueba ER evalúa el tiempo medio que un lote de semillas necesita para germinar, también conocido como período de latencia. Esta técnica destaca por su rapidez, objetividad y correlación con el desempeño de las semillas en el campo. Aunque originalmente validada para cultivos como maíz, colza, rabanito y trigo por la Asociación Internacional de Análisis de Semillas (ISTA), su aplicación a la soja es un avance reciente impulsado por los investigadores argentinos.
“Nuestro objetivo fue demostrar que el recuento de emergencia de radícula puede ser empleado como una prueba rutinaria de vigor para semillas de soja,” señaló Gallo.
Los estudios realizados por el equipo de INTA Oliveros mostraron que la prueba ER tiene una alta correlación positiva con métodos tradicionales, como la prueba de vigor de tetrazolio para soja. Además, los resultados obtenidos a las 48 horas a 20 °C demostraron una fuerte relación con la emergencia de campo, confirmando su utilidad para predecir el comportamiento de las semillas en condiciones reales.
“La prueba ER permite diferenciar lotes de semillas de manera sencilla y rápida, algo fundamental para los productores que buscan optimizar la implantación del cultivo,” añadió la investigadora.
Importancia para la soja
El desarrollo de herramientas como la prueba ER representa un paso clave hacia la mejora de la productividad agrícola. La posibilidad de clasificar los lotes de semillas según su vigor no solo facilita la toma de decisiones, sino que también contribuye a una siembra más eficiente y sostenible.
En un contexto donde las condiciones climáticas son cada vez más impredecibles, contar con semillas de alta calidad y vigor puede marcar la diferencia en el éxito de un cultivo. Este nuevo método se presenta como una alternativa práctica y confiable, alineada con las demandas de los productores y las exigencias del mercado.
El INTA continúa liderando avances en innovación agrícola, reforzando su compromiso con el desarrollo de tecnologías que beneficien al sector y promuevan prácticas agrícolas más eficientes.