Santa Fe: la cosecha de girasol 2025 avanza a pesar de las lluvias
El avance de la cosecha de girasol en la provincia de Santa Fe continúa a pesar de las intensas lluvias que afectaron la región en los últimos días. Según el informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, emitido por la Bolsa de Comercio de Santa Fe, las precipitaciones registradas entre el 25 de febrero y el 4 de marzo de 2025 condicionaron las labores agrícolas, aunque en algunas zonas se logró progresar con la recolección del cultivo.
El impacto del clima en la cosecha de girasol
Las lluvias generalizadas provocaron una paralización en la mayoría de los trabajos agrícolas, con excepción del girasol, cuya cosecha pudo avanzar en ciertos lotes del centro-oeste santafesino. Sin embargo, en otras áreas, la recolección estuvo suspendida debido a las condiciones climáticas adversas y los altos niveles de humedad ambiente, factores que impidieron continuar con las tareas en el campo.
A pesar de las dificultades, los productores de girasol lograron obtener buenos rendimientos en las áreas cosechadas. Los valores registrados hasta el momento muestran promedios mínimos de 12 a 14 quintales por hectárea (qq/ha), con valores medios de 24 a 26 qq/ha y máximos de 31 a 32 qq/ha. En algunos lotes puntuales, los resultados fueron aún más alentadores, alcanzando los 40 qq/ha, superando las expectativas iniciales del sector productivo.
En términos sanitarios, no se reportaron enfermedades en los cultivos de girasol, aunque continuó la presencia de aves como loros y palomas en áreas cercanas a montes naturales, ocasionando daños significativos en las plantaciones.
Maíz temprano: cosecha detenida por el clima
El maíz temprano fue uno de los cultivos más afectados por las condiciones climáticas adversas, ya que la cosecha estuvo completamente paralizada debido a la humedad elevada, la falta de piso en los lotes y la dificultad de acceso a los mismos.
A pesar de esta situación, los rendimientos obtenidos en los primeros lotes cosechados fueron positivos:
- Sector norte: mínimos de 58-60 qq/ha, máximos de 65-68 qq/ha, con lotes puntuales de hasta 70 qq/ha.
- Sector centro: mínimos de 65-70 qq/ha, máximos de 85-95 qq/ha y picos de 120 qq/ha.
- Sector sur: mínimos de 65-70 qq/ha, máximos de 85-100 qq/ha, con lotes destacados de hasta 110 qq/ha.
Soja temprana: impacto en las estructuras reproductivas
En cuanto a la soja de primera, los cultivos en estado reproductivo presentaron daños en las estructuras florales y vainas incipientes, especialmente en el norte de la provincia. Sin embargo, en el centro y sur de la región, las mejores condiciones climáticas de los últimos días han permitido una recuperación parcial de los cultivos.
Un problema creciente en estos lotes es la proliferación de malezas, cuya presencia se ha incrementado notablemente en un alto porcentaje de los sembradíos debido a la humedad y las condiciones ambientales favorables para su desarrollo.
Algodón: variabilidad en los cultivos y posible impacto en la calidad
El cultivo de algodón presentó una situación heterogénea en la provincia, con estados variables que van desde “muy malos” hasta “buenos” e incluso “muy buenos” en casos particulares. La combinación de estrés térmico por altas temperaturas y estrés hídrico debido a precipitaciones desiguales ha afectado el desarrollo del cultivo, reduciendo su altura y provocando abortos en estructuras reproductivas.
Se estima que la cosecha en los lotes sembrados más temprano podría comenzar a mediados de marzo. Sin embargo, se han identificado parcelas en mal estado que podrían requerir un segundo ciclo de producción, lo que implicaría pérdidas en la calidad de la fibra y menores rendimientos, además de aumentar los riesgos ante posibles heladas.
El informe concluye que, si bien las precipitaciones recientes han complicado el desarrollo normal de las labores agrícolas, sobre todo del girasol, las perspectivas siguen siendo favorables para los cultivos que lograron sobrellevar las adversidades climáticas. La expectativa está puesta en la evolución del clima en las próximas semanas, ya que un período de estabilidad permitiría retomar las cosechas y mejorar los rendimientos generales en la región.
