La raza Aubrac: el legado de ganadería en la Montaña en Francia


La raza Aubrac, originaria de la meseta del mismo nombre en el Macizo Central de Francia, es mucho más que una raza bovina. Con su llamativo pelaje dorado, ojos delineados y cuernos en forma de lira, esta vaca no solo es un símbolo de la región, sino también un ejemplo de adaptabilidad, eficiencia y sostenibilidad en la ganadería.

Un Tesoro Ganadero con Historia

La raza se forjó en la meseta de Aubrac, una región montañosa conocida por sus condiciones climáticas extremas. Durante el siglo XX, vivió su apogeo como raza mixta, apreciada tanto por su capacidad de trabajo como por su producción lechera y cárnica. Sin embargo, el avance de la mecanización y la reducción de prácticas tradicionales como la elaboración de quesos en los burones (cabañas pastoriles), contribuyó al declive de la raza.

Aubrac, ganadería

El cruce descontrolado con razas de carne, como la Charolais, casi llevó a la extinción a la Aubrac. Fue en la década de 1970 cuando un grupo de criadores apasionados tomó la iniciativa de recuperar esta raza en su pureza original. Fundaron la Unión Aubrac, que hoy gestiona la selección y reproducción de estos animales según estándares específicos.

Gracias a este esfuerzo, el número de vacas Aubrac ha crecido significativamente y la raza se ha expandido a nivel nacional e internacional, consolidándose como un símbolo de la pruducción sostenible.

El atractivo visual de la vaca Aubrac es inconfundible:

  • Pelaje dorado: Su color trigo contrasta con las extremidades negras y el hocico blanco.
  • Ojos delineados: Su contorno negro le da una apariencia única y fácilmente reconocible.
  • Cuernos en forma de lira: Característica de su noble apariencia.
Aubrac, ganadería

En términos funcionales, la raza se distingue por su:

  • Rusticidad: Perfectamente adaptada a las condiciones climáticas extremas del Macizo Central.
  • Longevidad: Su promedio de vida productiva supera los 10 años.
  • Facilidad de parto: Procesos rápidos y sin complicaciones.
  • Habilidad maternal: Alta producción de leche para amamantar a los terneros.
  • Eficiencia reproductiva: Excelente fertilidad y regularidad en la cría.
Aubrac, ganadería

Un Modelo de Ganadería Extensiva

La Aubrac se cría principalmente en sistemas de producción extensiva, donde los animales se alimentan casi exclusivamente de pastos y forrajes cultivados en las propias granjas. Los terneros se crían bajo la madre, lo que refuerza su desarrollo natural y bienestar. Esta filosofía de crianza no solo garantiza la calidad de la carne, sino que también reduce el impacto ambiental de la actividad ganadera.

Además, la raza destaca tanto en la producción pura como en cruces con toros especializados en carne, gracias a su capacidad para mantener altos estándares de calidad.

La vaca Aubrac no solo es esencial para la economía local, sino también para la identidad cultural de la región. Es común encontrar su imagen en fachadas de restaurantes, souvenirs y logotipos locales. Además, varios eventos celebran su importancia:

Aubrac, ganadería
  • Trashumancia (mayo): Los ganaderos llevan las vacas a los pastos de montaña, una tradición que se convierte en fiesta popular, atrayendo a miles de visitantes.
  • Fiesta de los Bueyes Gordos (marzo): Una subasta de carne que reúne a ganaderos y celebra la calidad de la producción cárnica.
  • Concursos de Raza (otoño): Los criadores compiten en distintas categorías para que sus animales sean reconocidos entre los mejores. El punto culminante es el Salón Agrícola de París, donde se exhibe la excelencia de la raza Aubrac a nivel nacional.

Hoy en día, la raza Aubrac es un ejemplo de resiliencia y sostenibilidad. Su recuperación no solo garantiza la preservación de una raza emblemática, sino que también refuerza el compromiso con una producción que respeta la tradición, el medio ambiente y la calidad de los productos. La Aubrac es mucho más que un animal de pastoreo; es un símbolo vivo del vínculo entre la tierra, la cultura y la comunidad.