Qué es el RIDA, el proyecto revival de la ley agrobioindustrial
El Régimen de Inversiones para el Desarrollo Agroindustrial (RIDA) es una iniciativa legislativa que busca revitalizar el sector agroindustrial en Argentina, emulando el espíritu del anterior Régimen de Incentivo a las Inversiones en el Sector Agroindustrial (RIGI). Este proyecto, que podría llamarse una versión renovada de la ley agrobioindustrial, tiene como objetivo principal atraer inversiones y fomentar el desarrollo del sector agroindustrial, fundamental para la economía del país.
El RIDA surgió a partir del esfuerzo del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la colaboración de diversos legisladores. En su momento, un proyecto similar obtuvo consenso pero no llegó a aprobarse. Ahora, con el RIDA, el CAA espera lograr lo que antes no fue posible, apoyándose en el trabajo de los diputados Atilio Benedetti y Miguel Ángel Pichetto, quienes lideran la iniciativa junto a otros 19 legisladores de distintos espacios políticos, excepto el oficialismo.
El rol José Luis Espert
Un factor crucial para la aprobación del RIDA es el apoyo del legislador libertario José Luis Espert, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Aunque el proyecto cuenta con el respaldo de legisladores peronistas y del PRO, aún no ha logrado sumar a los libertarios. La clave para el avance del proyecto reside en la capacidad de Espert para comprender y apoyar la propuesta, lo que podría destrabar su tratamiento en la Comisión de Presupuesto y Hacienda.
El RIDA propone diversos incentivos para promover la producción agroindustrial, tales como:
- Amortizaciones aceleradas: Facilitar la depreciación rápida de bienes de capital.
- Desgravaciones fiscales: Beneficios fiscales para el uso de fertilizantes y semillas propias, entre otros incentivos.
Estos incentivos están diseñados para minimizar o eliminar el costo fiscal, un aspecto crucial en el contexto económico actual, donde cada dólar cuenta.
Proceso Legislativo
El proyecto ya ha sido ingresado y está en tratamiento en la Comisión de Agricultura. No obstante, el verdadero desafío reside en la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Recientemente, se realizaron reuniones con dirigentes de Coninagro para mejorar el proyecto, y se espera una reunión clave con José Luis Espert para discutir los detalles y buscar su apoyo.
En comparación con la anterior ley agroindustrial, el RIDA ha simplificado y eliminado ciertos artículos conflictivos, como aquellos relacionados con cambios laborales y retenciones. Esta simplificación busca evitar contratiempos y facilitar la aprobación del proyecto.
Perspectivas y Próximos Pasos
El sector agroindustrial y los legisladores están dispuestos a negociar y ajustar el proyecto para asegurar su viabilidad. Se espera que el proyecto obtenga dictamen en agosto o septiembre. La buena voluntad de la oposición y la disposición a dialogar podrían ser fundamentales para el avance del RIDA. En este contexto, el apoyo de los legisladores libertarios se considera crucial para que el proyecto prospere.
El RIDA representa una oportunidad significativa para impulsar las inversiones en el sector agroindustrial argentino, y su aprobación podría ser un paso importante hacia el desarrollo económico del interior del país.