Primavera 2024: se esperan mejoras en el clima para la zona núcleo
Las perspectivas del clima para la zona núcleo de la región pampeana, así como para otras regiones productivas de Argentina, son motivo de atención ante la necesidad urgente de lluvias que puedan mejorar la situación hídrica de los suelos. Luego de un septiembre seco que dejó serias deficiencias en las reservas de agua, el pronóstico para la segunda semana de octubre se presenta alentador. Las lluvias llegarán a esta región, clave para la agricultura y la ganadería, lo que podría marcar una mejora en los cultivos que han sufrido durante las últimas semanas.
Expectativas en la zona núcleo
A partir del lunes y durante la primera parte del martes, se espera que las precipitaciones comiencen a generalizarse en las provincias del centro de la región pampeana, como Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, y en el norte de La Pampa. Estas lluvias, aunque irregulares, representan una oportunidad para que los suelos recuperen humedad, algo especialmente necesario en esta época del año. Las precipitaciones podrían alcanzar acumulados importantes, superando los 50 milímetros en algunas áreas, lo cual sería un alivio para los productores que esperan que las condiciones mejoren antes del inicio de la campaña gruesa.
No obstante, la recomposición hídrica no será uniforme en toda la zona núcleo. El norte bonaerense, por ejemplo, se encuentra en una posición de transición, donde las lluvias serán menos predecibles y posiblemente menos abundantes. El sur de esta región podría beneficiarse de acumulados más significativos, pero el norte enfrentará una mayor aleatoriedad en la distribución de las lluvias. El resultado es que mientras algunas áreas comenzarán a recuperarse, otras podrían seguir sufriendo condiciones de sequía.
Impacto en otras regiones del país
Además de la zona núcleo, otras regiones productivas del país también recibirán lluvias durante esta semana. En el NEA y el norte de la Mesopotamia, como Chaco, Formosa y Corrientes, se esperan lluvias que mejorarán el perfil de humedad, aunque de manera más moderada que en la región pampeana. También se espera que estas lluvias alcancen algunas zonas del NOA, lo cual ayudará a aliviar la situación en regiones que han sufrido una sequía prolongada.
El martes continuará con lluvias y tormentas en Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, extendiéndose hacia el centro de La Pampa y el sudoeste de Buenos Aires. Para el miércoles, las precipitaciones se desplazarán hacia el noreste, alcanzando zonas como Santiago del Estero y Formosa, aunque con menores acumulados en comparación con la zona núcleo. A medida que avancen los días, la actividad de lluvias irá disminuyendo en el centro del país, dejando algunas áreas con cielos cubiertos pero sin precipitaciones significativas.
Jueves y viernes: cambio de circulación
A medida que la semana avanza, el panorama climático comenzará a estabilizarse. El jueves, las precipitaciones se concentrarán principalmente en Corrientes, Misiones y el este de Paraguay, con lluvias dispersas que podrían extenderse hacia el centro de Santa Fe. Sin embargo, los acumulados no serán relevantes en estas áreas. Para el viernes, se espera un cambio en la circulación del viento, que rotará hacia el sector sur-sudoeste, lo que promoverá un secado importante de la masa de aire y el inicio de una secuencia de días más estables.
El fin de semana traerá una mejora en las condiciones generales, con una disminución significativa de las lluvias. En Misiones persistirán algunas precipitaciones, pero el resto de la Mesopotamia y la región pampeana quedarán libres de lluvias, lo que permitirá a los productores evaluar el impacto de las precipitaciones de los días anteriores.
Pronóstico para el fin de semana
Durante el sábado y domingo, se espera que el corredor central del país, desde Cuyo hasta el estuario del Río de la Plata, mantenga cielos nubosos y algunas lluvias débiles dispersas. Estas precipitaciones, aunque ligeras, contribuirán a sostener las mejoras observadas a principios de la semana. Sin embargo, no se esperan grandes acumulados, sino más bien una pausa en la actividad atmosférica, lo cual podría dar tiempo a los suelos para absorber las lluvias y comenzar el proceso de recuperación.
En resumen, la segunda semana de octubre trae consigo una esperanza de mejora para las condiciones agrícolas en la zona núcleo de Argentina. Las lluvias ayudarán a aliviar la sequía en algunas áreas, aunque la recomposición no será pareja en todas las regiones. Las expectativas son altas, y aunque no todos los cultivos podrán recuperarse por completo, muchos podrían detener su deterioro y comenzar a repuntar.
