Primavera 2024: el clima se perfile seco y más caluroso que lo normal
El fenómeno La Niña, aunque aún no se manifestó plenamente, parece estar marcando las condiciones de clima que se esperan para la Primavera en Argentina, lo que podría traer desafíos significativos para el sector agropecuario. Según el pronóstico climático trimestral publicado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) para el período septiembre-noviembre, el país se enfrenta a un escenario de altas temperaturas combinadas con escasas lluvias, un panorama que no augura buenas noticias para los productores agrícolas.
Una primavera marcada por la sequía
El informe del SMN advierte que gran parte del territorio argentino experimentará un trimestre con precipitaciones por debajo de lo habitual. Las áreas más afectadas serán la región Norte, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y la región de Cuyo, donde se espera que las lluvias sean inferiores a la media histórica. Asimismo, el norte del Litoral, gran parte del NOA, Buenos Aires, La Pampa y la región de la Patagonia también podrían recibir menos lluvias de lo normal, mientras que el extremo oeste del NOA tendrá una estación seca.
Este déficit hídrico es particularmente preocupante dado el contexto agrícola, donde la disponibilidad de agua es crucial para el desarrollo de los cultivos. La escasez de lluvias podría afectar negativamente la producción, especialmente en las etapas críticas del crecimiento de las plantas, y podría agudizar la sequía que ya empieza a manifestarse en algunas provincias.
Un trimestre más cálido de lo habitual
Además de la falta de lluvias, el pronóstico climático señala que la mayor parte del país enfrentará temperaturas más altas de lo normal. En el noroeste del país, que incluye provincias como Catamarca, La Rioja, Tucumán, y el oeste de Salta y Jujuy, las temperaturas medias serán significativamente superiores a lo habitual, exacerbando las condiciones secas. En contraste, el este de la Patagonia podría registrar temperaturas dentro de los parámetros normales, pero el resto del país tendrá una tendencia clara hacia valores térmicos más elevados.
El SMN subraya que, aunque este pronóstico se refiere a condiciones climáticas medias, eventos meteorológicos específicos como olas de calor, heladas o tormentas pueden ocurrir en cualquier momento, incluso en un trimestre donde se espera un clima general desfavorable. Esto añade un nivel adicional de incertidumbre para los productores, quienes deberán estar preparados para enfrentarse a posibles eventos extremos que podrían afectar sus cosechas.
Impacto en el campo
El pronóstico de un trimestre seco y cálido es un golpe para el sector agropecuario, que ya venía lidiando con desafíos como la expansión de la chicharrita del maíz. El frío del invierno había sido un factor clave para frenar la proliferación de esta plaga, pero con el regreso de temperaturas más cálidas y la falta de precipitaciones, existe el riesgo de que la situación empeore en las próximas semanas.
El próximo trimestre presenta un panorama complejo para el agro en Argentina. Las condiciones previstas de sequía y calor exigen una planificación cuidadosa por parte de los productores, quienes deberán tomar decisiones estratégicas para mitigar los posibles impactos en sus cultivos. La capacidad de adaptación y la resiliencia serán claves para superar este nuevo desafío climático.