Noviembre: la alta faena vacuna impulsa el consumo interno y recupera márgenes
En noviembre, la actividad de faena vacuna en Argentina se mantuvo en niveles elevados, aunque con una leve disminución respecto a meses anteriores. Este comportamiento permitió una recuperación del consumo interno de carne, al tiempo que los distintos eslabones de la cadena ganadera comenzaron a recomponer sus márgenes, presionados este año por crecientes costos en energía, combustibles y salarios.
Datos de faena y consumo interno
De acuerdo con datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), en noviembre se enviaron a los frigoríficos 1,174 millones de cabezas de ganado, lo que representó una caída del 7 % frente a octubre y del 5 % en comparación con el mismo mes del año pasado. A pesar de esta baja, la oferta de hacienda fue suficiente para sostener tanto la producción como las exportaciones de carne vacuna.
El peso promedio por res faenada en octubre fue de 228 kilos, tres kilos menos que en meses previos, una tendencia que continuó en noviembre debido a una mayor participación de animales provenientes de feedlots, como novillitos y vaquillonas. Con este promedio, se estima que en noviembre se produjeron unas 270.000 toneladas de carne vacuna con hueso, de las cuales cerca de 80.000 toneladas fueron destinadas a la exportación. Esto dejó disponibles 190.000 toneladas para el mercado interno, lo que equivale a un consumo promedio de 48 kilos por habitante al año.
Factores que impulsaron los precios
Si bien el abastecimiento interno se sostuvo gracias al aporte de ganado liviano procedente de feedlots, las recientes subas en los precios de la carne se explican por otros factores. Las lluvias primaverales favorecieron el rebrote de pasturas, incentivando la recría y la retención de animales. Esto permitió una mejor convalidación de precios por parte de frigoríficos y matarifes, que enfrentaron importantes incrementos en sus costos operativos a lo largo del año.
El sector cárnico requiere una actualización de precios para equilibrar los márgenes comerciales, industriales y de producción, que se redujeron significativamente durante 2024.
Perspectivas para diciembre
Los feedlots, que actualmente están en proceso de vaciado, cuentan con un stock elevado de 1,74 millones de cabezas, lo que garantiza un buen abastecimiento de ganado liviano para diciembre. Este aporte asegura que el consumo interno se mantenga firme, incluso en un contexto donde las exportaciones representan el 30 % de la producción total.
La oferta de carne vacuna se complementa con otras proteínas cárnicas como el pollo (48 kilos per cápita) y el cerdo (20 kilos per cápita). Según datos privados, el consumo total de carne en Argentina alcanza los 115 kilos por habitante al año, posicionando al país como líder en Sudamérica y segundo a nivel mundial, detrás de Estados Unidos (129 kilos).
Daniel Urcia, de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales (FIFRA), destacó que el alto consumo de carnes en Argentina es un indicador positivo en términos de salud y acceso alimentario. Además, señaló que el crecimiento de las exportaciones no afecta al mercado interno gracias a la diversificación en la oferta de proteínas.
El sector cárnico argentino cierra noviembre con indicadores favorables tanto en consumo interno como en exportaciones, en un contexto de alta producción y un mercado abastecido. Sin embargo, la recomposición de precios será clave para enfrentar los desafíos económicos que afectan a toda la cadena de valor. Con una oferta diversificada y una demanda interna sólida, Argentina continúa siendo un referente en la producción y el consumo de carnes a nivel global.