Misiones: se postergó la prohibición del glifosato para 2030
La provincia de Misiones decidió postergar por cinco años la implementación de la prohibición del uso de glifosato, una medida que estaba prevista para entrar en vigencia en julio de 2025. Ahora, con la prórroga establecida por el Decreto provincial N° 1608, la prohibición se implementará en 2030. Esta decisión fue tomada por el gobernador Hugo Passalacqua en respuesta a las preocupaciones expresadas por el sector productivo de la región.
La lucha contra el glifosato
El glifosato, un herbicida ampliamente utilizado en la agricultura, fue objeto de debate a nivel global debido a sus posibles efectos adversos en la salud humana y el medio ambiente. Sin embargo, en Misiones, su uso sigue siendo fundamental para la producción de cultivos clave como la yerba mate, el té, el tabaco y la industria forestal. La prórroga de la prohibición fue recibida con alivio por estos sectores, aunque persisten las inquietudes sobre el futuro de la normativa y la falta de alternativas viables al glifosato.
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) emitió un comunicado destacando que, si bien la medida ofrece un respiro temporal a los productores, la preocupación sigue latente. Los productores temen que, sin un sustituto eficaz al glifosato, sus actividades se vean seriamente comprometidas, lo que podría afectar su competitividad, especialmente en comparación con otras regiones donde el uso del herbicida sigue siendo permitido. Esto es particularmente relevante en un contexto en el que las economías regionales enfrentan múltiples desafíos, incluyendo fluctuaciones en los precios de los productos y la presión de cumplir con estándares de exportación.
El decreto no solo extiende el plazo para la prohibición, sino que también establece nuevas normativas que los productores deberán cumplir para acogerse a la prórroga. Entre estas, se incluye la obligación de inscribirse en un registro y presentar documentación que acredite las exigencias necesarias para la extensión del uso del glifosato. Además, se requiere que los productores elaboren un plan de transición hacia métodos más amigables con el ambiente, lo que indica un esfuerzo por parte del gobierno provincial para reducir gradualmente la dependencia de este herbicida.
El Ministerio de Agro y la Producción de Misiones jugará un papel clave en la implementación de estas normativas, limitando la superficie en la que se podrá utilizar el glifosato y estableciendo la cantidad anual permitida del producto. También se exigirá a los productores que desarrollen medidas de mitigación para reducir los posibles daños asociados al uso del glifosato, lo que refleja una creciente preocupación por los impactos ambientales y la sostenibilidad de las prácticas agrícolas en la región.
A pesar de la prórroga, la decisión del gobierno de Misiones dejó un “sabor a poco” entre algunos sectores que esperaban un veto total a la ley. La falta de un veto generó incertidumbre sobre el futuro de la normativa y la posibilidad de que la prohibición se convierta en una realidad en 2030. Esto subraya la necesidad de continuar el diálogo entre el gobierno, los productores y otros actores involucrados para encontrar soluciones que equilibren la protección del medio ambiente con la viabilidad económica del sector productivo.
En este sentido, la CAME enfatizó la importancia de promover instancias de intercambio y diálogo, asegurando que cualquier legislación que impacte en el sector productivo se base en fundamentos sólidos y tenga en cuenta las realidades y necesidades de los productores. La búsqueda de alternativas al glifosato será crucial en los próximos años, no solo para cumplir con las futuras regulaciones, sino también para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de la agricultura en Misiones.
La prórroga de la prohibición del uso de glifosato en Misiones hasta 2030 ofrece un alivio temporal a los productores, pero también plantea nuevos desafíos y la necesidad de adaptación. La implementación de las nuevas normativas y la búsqueda de alternativas viables serán fundamentales para asegurar que el sector productivo de la provincia pueda seguir siendo competitivo y sostenible en el futuro.