Mercado de granos: cómo se comportó esta semana


El mercado de granos de commodities agrícolas en Chicago tuvo una jornada con movimientos moderados, donde la soja y los cereales mostraron comportamientos contrastantes. La soja experimentó una leve baja del 0,07%, cerrando en US$372,31 por tonelada, pero permaneció cerca de la neutralidad, respaldada por los buenos datos de exportaciones semanales de Estados Unidos. El Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) informó ventas de 1,75 millones de toneladas, superando las expectativas del mercado, que se situaban en 1,6 millones de toneladas. A su vez, se anticipan mayores lluvias en octubre, lo que podría influir en el desarrollo de la próxima siembra de soja.

Los detalles del Mercado de Granos

En cuanto a los cereales, tanto el maíz como el trigo operaron con pérdidas. El maíz cayó un 1,7%, cerrando en US$159,74, presionado por el avance de la cosecha en Estados Unidos, que continúa registrando récords de rendimiento según las consultoras agrícolas. Además, el Consejo Internacional de Cereales ajustó a la baja su estimación de la producción mundial de maíz para la campaña 2024/25 en 2 millones de toneladas, situándola en 1.224 millones. En el mercado local, el precio del maíz disponible en Rosario se mantuvo en $170.000 por tonelada, con valores diferidos en USD 181 para Up River en diciembre/enero.

El trigo, por su parte, también mostró caídas en su cotización en el mercado de granos, cerrando en US$207,79 tras una baja del 1,78%. Las exportaciones semanales de EE. UU. fueron de 246.300 toneladas, por debajo de lo esperado, lo que contribuyó a la presión bajista. A pesar de los riesgos geopolíticos derivados de la guerra en Europa del Este, el trigo del Mar Negro sigue mostrando precios competitivos. En el mercado local, el precio del trigo en el Gran Rosario fue de $200.000, llegando a $205.000.

En resumen, mientras que la soja mantuvo su estabilidad en el mercado de granos gracias al buen ritmo de exportaciones, los cereales enfrentaron presiones a la baja debido a las altas producciones en Estados Unidos y el contexto internacional. Los mercados locales replicaron estos comportamientos, aunque los precios internos se mantuvieron relativamente estables.