Maíz tardío: lluvias, ausencia de chicharrita y márgenes positivos


La campaña de maíz tardío atraviesa un escenario prometedor, con condiciones agroclimáticas favorables, una marcada ausencia de la plaga Dalbulus maidis (chicharrita) y márgenes económicos que superan a los de la soja. Esto generó un renovado interés por el cereal y un incremento en la venta de semillas, según informes recientes.

Resultados alentadores en el monitoreo de la chicharrita del maíz

Un estudio realizado por la Red Nacional de Monitoreo Dalbulus maidis relevó 434 localidades en todo el país y reveló la casi total ausencia de la plaga. En las regiones Centro Sur y Centro Norte, más del 99% y 95% de las localidades, respectivamente, no registraron presencia de insectos, mientras que en Uruguay no se detectó la plaga en ninguna localidad monitoreada.

Federico Zerboni, presidente de Maizar, destacó que este informe era clave para la planificación de la siembra de maíz tardío, que representa el 60% de la superficie total de maíz en el país. “Los resultados coinciden con lo que ven los productores: la venta de maíz se incrementó significativamente en varias regiones debido a la ausencia de la chicharrita”, afirmó.

Lluvias y condiciones óptimas para la siembra

Las precipitaciones de noviembre mejoraron considerablemente los perfiles de humedad en el suelo, allanando el camino para una campaña gruesa exitosa. Zonas como Río Cuarto y Jesús María reportaron un repunte en las ventas de semillas de maíz, superando las expectativas iniciales. Zerboni añadió que los márgenes económicos favorables del maíz frente a la soja incentivaron a los productores a apostar por el cereal.

Sin embargo, los especialistas recomiendan no bajar la guardia. Aunque las poblaciones actuales de chicharrita son bajas, el monitoreo constante sigue siendo esencial, especialmente en regiones del NOA, NEA y Litoral, donde se detectaron focos aislados relacionados con maíces voluntarios.

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El informe enfatiza la importancia de mantener estrategias de control preventivo para evitar brotes de Dalbulus maidis:

  • Monitoreo continuo: Realizar inspecciones regulares en los cultivos establecidos y en las áreas propensas a focos de infestación.
  • Control de maíces voluntarios: Implementar medidas mecánicas o químicas para eliminar plantas que puedan servir como hospederas del vector.
  • Prevención en zonas críticas: Intensificar esfuerzos en el NOA, NEA y Litoral, donde las condiciones climáticas y la presencia de maíz voluntario podrían favorecer el desarrollo del vector.

Con lluvias abundantes, niveles de humedad óptimos y márgenes económicos atractivos, el maíz tardío se posiciona como una alternativa rentable para los productores. Si bien las perspectivas son alentadoras, el monitoreo y la adopción de medidas preventivas seguirán siendo clave para garantizar una campaña exitosa.

El interés renovado por el maíz, combinado con condiciones agroclimáticas favorables y una amenaza controlada de plagas, configura un escenario ideal para que los productores capitalicen esta oportunidad, fortaleciendo su apuesta por el cereal en la campaña 2024.