Los índices de faena traen alivio para la ganadería
Además de las noticias alentadoras de la agricultura, la ganadería también suma buenos indicios. En lo que respecta a la ganadería, los datos de faena muestran una tendencia que, si bien es inferior respecto al año pasado, no resulta tan desfavorable como se anticipaba hace algunos meses.
Según el mercado ganadero de Rosario (Rosgan), en abril se faenaron 1,07 millones de cabezas. Esta cifra representa un ligero crecimiento del 1,4% en comparación con el mes anterior, aunque significa una reducción del 13% respecto al mismo período del año pasado.
Desde la entidad ganadera señalaron que, si bien los números muestran una significativa disminución en comparación con el año anterior, el cambio de panorama con respecto al mismo período del año pasado sugiere una menor reducción en el nivel de sacrificios de lo esperado inicialmente.
Al llegar al final del primer cuatrimestre del año, el informé comenzó a proyectar algunos números para anticipar la dirección que tomarán los frigoríficos durante el resto del año. Se estima una faena potencial de 13,5 millones de cabezas para todo el año 2024, lo que representa un millón menos de animales en comparación con el año anterior.
En el análisis de la faena ganadera, es importante tener en cuenta diversos factores que influyen en las cifras registradas. Por ejemplo, el año pasado, la sequía desempeñó un papel significativo en la rápida salida de la hacienda de los campos, lo que contribuyó a que se procesaran 14,6 millones de cabezas, un número inferior al máximo de 15,1 millones registrado en 2022.
En los primeros cuatro meses de este año, se faenaron 4,34 millones de animales, lo que representa una disminución del 8% en comparación con los 4,72 millones faenados en el mismo período del año anterior. A pesar de esta reducción, estas cifras son una de las más altas de los últimos años para un primer cuatrimestre, excluyendo el año 2023, y se sitúan en niveles similares a los picos observados en 2008 y 2009.
Sin embargo, un aspecto preocupante es que la faena de hembras continúa siendo alta en proporción a la faena total, superando el 47% en el primer cuatrimestre. Aunque se observa una ligera reducción interanual en el número de hembras faenadas, cercana a las 300.000 cabezas, esta tendencia sigue siendo motivo de preocupación.
En cuanto a la distribución por categorías, se observa que el mayor retroceso interanual en la faena general se registró en novillos, con un 16%, seguido de las vacas, con un 13%. En contraste, los novillitos presentaron una disminución del 7%, mientras que las vaquillonas fueron las menos afectadas, con una caída del 3,6%.
Resulta llamativo que, en este contexto, no se observe un mayor nivel de retención de hembras jóvenes, como podría esperarse. En adelante, se espera que la faena se mantenga en niveles relativamente altos, con una ligera tendencia al aumento hacia el segundo semestre del año, según la estacionalidad típica del sector.