Las claves del discurso de Javier Milei en la BCR que despertó fuertes críticas del sector
El presidente de la Nación, Javier Milei, participó este viernes del acto por el 140° aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), una de las principales instituciones agroindustriales del país. A pesar de que la ciudad fueron sacudida por una amenaza de bomba horas antes, Milei no alteró su agenda y fue el principal orador de la ceremonia, en la que también participaron el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, y el presidente de la BCR, Miguel Simioni.
Simioni fue el encargado de abrir las alocuciones y se centró en uno de los temas más relevantes para el sector agropecuario: la alta presión impositiva, particularmente las retenciones. El dirigente subrayó que la reciente caída en los precios internacionales de los granos es un indicativo de la necesidad urgente de revisar las políticas internas que afectan negativamente a los productores y empresas del sector.
Simioni reiteró la importancia de avanzar hacia una reducción progresiva de los derechos de exportación hasta su eliminación total, destacando que la situación actual de los precios es similar a la de 2006, pero con una carga impositiva mucho más pesada. ”Es un tema remanido, y ustedes saben que en esta casa lo escucharon muchas veces. Hoy la soja tiene un 33% con una baja, y el otro día nosotros sacamos un informe que muestra un precio de la soja similar al de 2006”, aseguró el dirigente.
A pesar de estar en el principal recinto de referencia del mercado de granos en Argentina, Javier Milei evitó cualquier mención específica al sector agropecuario en su discurso. Este hecho no pasó desapercibido, especialmente después de su participación en La Rural 2024, donde había anunciado la eliminación de las retenciones para los lácteos y reducciones de impuestos para las exportaciones de carne.
En lugar de centrarse en temas agroindustriales, Javier Milei reiteró su compromiso con la reducción de impuestos en general, aunque sin ofrecer detalles concretos sobre cuándo o cómo se implementarán estas medidas. “Tenemos pendientes 3.200 reformas estructurales más y vamos a hacer que Argentina sea efectivamente el país más libre del mundo para que sea el país más próspero del mundo”, manifestó.
El presidente Javier Milei utilizó la mayor parte de su discurso para criticar la reciente aprobación en el Senado de una ley que aumenta las jubilaciones, la cual vetó por considerarla inviable en el contexto económico actual. Milei argumentó que dicha ley, sin una contrapartida de recursos, habría generado un aumento en el impuesto inflacionario y un incremento en el riesgo país, lo que, según él, condenaría a las futuras generaciones a una situación económica insostenible. El presidente calificó la reforma previsional aprobada como un acto de “irresponsabilidad, populismo y demagogia”, y sostuvo que desde su llegada al poder, las jubilaciones superaron a la inflación, mientras que se registró una mejora en los salarios reales y un rebote en la economía.
Durante su intervención, Javier Milei también se refirió a la necesidad de mantener el equilibrio fiscal, algo que considera fundamental para la estabilidad económica del país. “Hago lo que digo siempre, mi palabra no se negocia y no les voy a dejar pasar ni un milímetro a los degenerados fiscales que quieren arruinar este país por tener beneficios para la casta política. Si ustedes quieren una buena política social, la mejor política social ¿saben cuál es? Bajar la inflación”, afirmó.
Javier Milei señaló que su administración logró reducir el déficit fiscal en tiempo récord y defendió su política económica como la más efectiva en la historia reciente de Argentina. Sin embargo, su insistencia en estos temas y la falta de anuncios específicos para el sector agroindustrial generaron una recepción mixta entre los asistentes, que aplaudieron con menos entusiasmo a medida que avanzaba su discurso. “En 7 meses metimos un ajuste fiscal de más de 15 puntos del PBI, haciendo el ajuste fiscal más grande de la historia de la humanidad”, agregó.
“Hay una fuerte recuperación de los salarios reales. Hace más de tres meses que los salarios le vienen ganando sistemáticamente a la inflación. El ajuste fiscal que hicimos devolvió 15 puntos del PBI al sector privado en forma de ahorro. Por lo tanto, ese mayor ahorro es mayor inversión y por ende más crecimiento. Con la Ley Bases la reforma es cinco veces más grande que la que hizo Menem y si sumamos el DNU, con beneficios muy claros, la reforma es ocho veces más grande que en el gobierno de Menem” , aclaró Javier Milei.
El clima en la BCR era tenso, no solo por la amenaza de bomba que había obligado a evacuar el edificio horas antes, sino también por la gran movilización de seguridad en la zona y una manifestación que se desarrollaba en las calles aledañas, organizada por movimientos sociales y políticos. El discurso de Milei, que se enfocó en temas fiscales y macroeconómicos, contrastó con las expectativas del auditorio, que esperaba anuncios concretos para uno de los sectores más importantes de la economía argentina.
El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, quien habló antes de Javier Milei, aprovechó la ocasión para hacer un llamado al gobierno nacional para que preste más atención al campo y al interior del país. Pullaro destacó la importancia del sector productivo de Santa Fe, que incluye a los productores de soja, maíz, trigo y arroz, así como a los industriales que procesan estos productos. También hizo un reclamo por más inversiones en infraestructura, como la construcción de una tercera traza en la autopista Rosario-Santa Fe, que es vital para la logística del 70% de la producción agroindustrial de la región.
La participación de Milei en el acto por el 140° aniversario de la BCR dejó a muchos en el sector agroindustrial con un sabor agridulce. Si bien el presidente reafirmó su compromiso con la reducción de impuestos y la estabilidad fiscal, su falta de anuncios específicos para el sector dejó en el aire la sensación de que el campo sigue esperando medidas concretas que respondan a sus necesidades urgentes en un contexto de precios internacionales desfavorables y una carga impositiva elevada.
La respuesta de la Sociedad Rural de Rosario tras el discurso de Javier Milei
Su intervención generó desconcierto entre los presentes, principalmente porque se esperaba que abordara los desafíos específicos que enfrenta la cadena agrícola en Argentina. En lugar de eso, Javier Milei centró su discurso en los problemas políticos y económicos de su gestión, sin dedicar suficiente atención a las preocupaciones de los productores presentes.
La falta de enfoque del presidente en los temas agrícolas no pasó desapercibida y provocó una rápida respuesta del sector. Durante el fin de semana, la Sociedad Rural de Rosario emitió un comunicado en el que expresaba su preocupación por la “asfixia fiscal” que afecta a los productores, subrayando la necesidad urgente de que el gobierno, y específicamente Milei, tome medidas concretas para aliviar la carga fiscal que pesa sobre ellos. Aunque el comunicado no menciona directamente al presidente, se dirige a “todo el sistema político”, dejando claro que el sector agrícola espera acciones decisivas.
Uno de los puntos centrales del reclamo es la reducción de los Derechos de Exportación, conocidos comúnmente como retenciones. Estos impuestos fueron un tema de controversia durante años en Argentina, especialmente para los productores de cereales como el trigo, la soja y el maíz. El comunicado de la Sociedad Rural de Rosario destacó que la baja de los precios internacionales de los cereales empeoró la situación de rentabilidad para el sector agrario, y que esta realidad, combinada con la alta presión impositiva, está asfixiando a los productores.
La brecha cambiaria, el alza de costos y la presión impositiva en los niveles nacional, provincial y municipal son mencionados como factores que contribuyen a esta asfixia fiscal. La Rural rosarina subraya que estos elementos, junto con la falta de señales claras del gobierno sobre una posible reducción de retenciones, están generando un clima de incertidumbre y descontento entre los productores.
El pedido de la Sociedad Rural de Rosario no es nuevo, pero sí adquiere una renovada urgencia en el contexto actual. La falta de respuesta por parte del presidente Javier Milei y su aparente desconexión con los problemas específicos del sector durante su discurso en la Bolsa de Comercio de Rosario exacerbaron las preocupaciones. El sector agrícola, que es un pilar fundamental de la economía argentina, sigue esperando que el gobierno tome medidas concretas para mejorar su situación y aliviar la carga fiscal que enfrentan.
