Inversora Juramento: la joya de la ganadería en el corazón de Salta
Inversora Juramento (IJSA), fundada hace 25 años, es una de las compañías agrícolas-y de ganadería más relevantes del noroeste argentino. Con sede en la provincia de Salta y una extensión de 89.500 hectáreas propias, esta empresa se ha consolidado como líder en la producción de carne para consumo interno y exportación. La compañía representa el legado del fallecido Jorge Brito, expresidente del Banco Macro, quien siempre mantuvo un profundo interés por el sector ganadero.
Un modelo de negocio integrado de la ganadería
IJSA se caracteriza por su modelo de integración vertical que abarca todas las etapas del proceso ganadero: cría, recría, engorde a corral (feedlot), industrialización y venta al consumidor final. Este enfoque le permite maximizar la eficiencia operativa y garantizar la calidad de sus productos en cada paso de la cadena de valor.
La empresa controla el Frigorífico Bermejo S.A., que maneja la planta de procesamiento de carne más grande de Salta y la segunda del noroeste argentino, con una capacidad de faena de hasta 13.000 cabezas mensuales. Actualmente, el promedio de faena mensual ronda las 9.000 cabezas, lo que subraya el rol central del frigorífico en las operaciones de IJSA.
IJSA abastece carne tanto al mercado interno, con un fuerte enfoque en las provincias del norte, como al segmento de exportación. La comercialización se realiza a través de 24 puntos de venta minoristas, ubicados en Salta, Jujuy, Tucumán, y el área metropolitana de Buenos Aires. Además, atiende a hoteles, restaurantes y otros grandes clientes, con un segmento de exportación que incluye envíos a la Unión Europea.
En 2022, la proporción de ingresos provenientes de exportaciones representó el 7,6%, aunque el mercado interno sigue siendo su principal fuente de ingresos.
El feedlot y la actividad agrícola
IJSA gestiona un feedlot de alta capacidad que alimenta directamente al frigorífico. En junio de 2022, el stock ganadero total de la empresa alcanzó las 95.704 cabezas, distribuidas entre el rodeo de cría (22.210 cabezas) y la invernada (73.494 cabezas). La actividad agrícola complementa este modelo, ya que una parte significativa de la producción de maíz y soja se destina al engorde del ganado.
En sus tierras, IJSA cultiva maíz, soja, sorgo y alfalfa bajo riego. Este sistema les permite producir los insumos necesarios para la alimentación animal, reduciendo la dependencia de fluctuaciones en los precios del mercado. Además, los excedentes de soja son comercializados a terceros, mientras que el estiércol del feedlot se utiliza como abono para cerrar un ciclo productivo sustentable.
Aunque IJSA es una de las principales empresas del sector, enfrenta desafíos financieros significativos. En su balance anual cerrado en septiembre de 2021, la compañía reportó ventas brutas por $13.800 millones, pero registró pérdidas netas de $3.000 millones debido al aumento de los costos de producción, una problemática recurrente en los feedlots.
En términos de deuda, la empresa mantiene compromisos financieros por $2.700 millones, todos en situación normal según el Banco Central de la República Argentina. Curiosamente, Banco Macro, fundado por Jorge Brito, no figura entre sus principales acreedores.
Con una sólida infraestructura y un modelo de negocio integrado, IJSA tiene el potencial de mantener su posición como líder en el sector ganadero del noroeste argentino. La empresa sigue trabajando para optimizar su eficiencia, expandir su presencia en mercados de exportación y adaptarse a las condiciones económicas del país.
La pasión por la ganadería y el compromiso con la producción local que caracterizaron a Jorge Brito continúan siendo el motor de Inversora Juramento, una empresa que combina tradición y modernidad en el competitivo mundo agroindustrial.
