Inflación: ajustan las proyecciones de marzo al 2,6% y anticipan quiebre del 2% recién en junio


Las expectativas de la inflación volvieron a subir. De acuerdo al último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), bancos y consultoras locales e internacionales calcularon que la inflación de marzo alcanzó el 2,6%, una cifra que supera tanto lo estimado previamente como el dato registrado en febrero, que fue del 2,4%.

El informe revela un deterioro en el escenario inflacionario proyectado por el mercado. En el relevamiento anterior, los analistas estimaban un Índice de Precios al Consumidor (IPC) del 2,2% para marzo, con una tendencia descendente que permitiría perforar el umbral del 2% ya en abril. Sin embargo, esos pronósticos fueron corregidos: ahora se prevé que el quiebre se dé recién en junio, cuando se espera un 1,8% mensual.

El REM también reflejó un ajuste al alza en las previsiones anuales. Para 2025, los analistas calculan una inflación acumulada del 27,5%, lo que implica una suba de 4,2 puntos porcentuales respecto a la estimación de marzo, que era del 23,3%. En cuanto a la inflación esperada para los próximos 12 meses, el pronóstico también aumentó: pasó del 22,2% al 24,5%.

inflación, marzo, 2025

La inflación núcleo —que excluye precios regulados y estacionales— también registró un repunte. Se estima que alcanzó el 2,6% en marzo, superando el 2% previsto anteriormente. Hacia fin de año, la inflación núcleo se ubicaría en 28,3%, 5,2 puntos porcentuales por encima del relevamiento previo (23,1%).

A pesar de estas correcciones al alza, desde el Banco Central remarcaron que “para los meses siguientes se esperan senderos descendentes de inflación mensual, tanto para el IPC nivel general como para el componente núcleo”. Sin embargo, el mercado se muestra más cauto frente a las proyecciones optimistas.

inflación, marzo, 2025

Dólar en alza: esperan $1.253 para diciembre

En materia cambiaria, el REM también reflejó una revisión alcista. Las expectativas de tipo de cambio oficial para diciembre de 2025 se ubicaron en $1.253 por dólar, lo que representa un incremento del 22,8% frente al relevamiento anterior, es decir, casi $78 más.

Para abril de 2025, la mediana de las proyecciones ubica el dólar oficial en $1.080, con un ritmo de devaluación mensual promedio del 1%. Estas cifras muestran que, a pesar de los esfuerzos del Gobierno por sostener el tipo de cambio, el mercado anticipa un ajuste más acelerado.

El PBI crecería un 5% en 2025

No todas son malas noticias. El informe del REM proyecta una mejora en la actividad económica. Para el primer trimestre de 2025, se espera que el Producto Bruto Interno (PBI), ajustado por estacionalidad, crezca un 1,5% respecto al trimestre anterior. Para los siguientes trimestres, se anticipa un crecimiento del 0,6% y 0,8%, respectivamente.

A nivel anual, el mercado espera que el PBI de 2025 sea un 5% superior al promedio de 2024. Esta cifra representa una mejora de 0,2 puntos porcentuales respecto a la proyección anterior.

agrodólares, campo, financiamiento, dólar, Luis Caputo, números, agro, campo, dólares, 2024, inflación, marzo, 2025

Baja en la desocupación y leve deterioro del comercio exterior

En cuanto al mercado laboral, el REM estimó una tasa de desocupación del 7% para el primer trimestre del año, lo que representa una mejora de 0,3 puntos respecto al informe anterior. De mantenerse la tendencia, se espera que la desocupación baje al 6,5% hacia el último trimestre de 2025.

En el frente externo, las proyecciones para el comercio de bienes indican un leve deterioro. Las exportaciones se estiman en US$83.269 millones, unos US$608 millones menos que en el REM anterior. En tanto, las importaciones aumentarían a US$72.934 millones (US$1.202 millones más). Así, el superávit comercial proyectado cae a US$10.335 millones.

inflación, marzo, 2025

El informe del REM ofrece un panorama mixto: mientras se retrasa la desaceleración inflacionaria y crecen las expectativas de devaluación, se consolida una leve recuperación económica y del empleo. El desafío del Gobierno será alinear estas variables para consolidar la estabilidad macroeconómica en el mediano plazo.