Incendio forestal en Epuyén: ya son más de 3 mil hectáreas consumidas
El incendio forestal que afecta la localidad de Epuyén, en la provincia de Chubut, sigue activo a pesar de haber transcurrido cinco días desde su inicio. Desde el miércoles pasado, más de 3 mil hectáreas de bosques y tierras han sido devoradas por las llamas, lo que ha llevado a la evacuación de más de 200 viviendas y ha dejado a 50 de ellas seriamente dañadas o destruidas.
Las condiciones climáticas juegan un papel crucial en la lucha contra el fuego. Si bien se espera que en las próximas horas lleguen lluvias que podrían ayudar a sofocar el incendio, los vientos fuertes que han azotado la región complican aún más las operaciones. Las altas temperaturas y las ráfagas sostenidas han hecho que la situación se mantenga delicada, creando un entorno adverso para los brigadistas y bomberos que trabajan incansablemente en contener el fuego.
Los esfierzos para contener el incendio en Epuyén
Desde el inicio del foco de incendio, el trabajo de los equipos de acción ha sido constante y multilateral. Los bomberos y brigadistas provienen de distintas localidades aledañas como Golondrinas, Cholila, Lago Puelo, El Maitén, Río Senguer, Esquel y Trevelin. También se han sumado efectivos de la Brigada Nacional Sur del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) y personal de Parques Nacionales Los Alerces y Lago Puelo, apoyados por dos aviones hidrantes, un avión observador y un helicóptero equipado con helibalde para combatir el fuego desde el aire.
José González, jefe del SNMF, enfatizó la dedicación y el compromiso de los equipos en el terreno, a pesar de las difíciles condiciones. “Estamos en una lucha constante contra las condiciones adversas, pero el compromiso de todos los equipos es admirable”, declaró, reflejando la realidad de quienes se encuentran en la primera línea de combate.
Aunque aún no se han difundido cifras exactas sobre las pérdidas materiales, las estimaciones preliminares sugieren que los daños podrían ascender a cifras millonarias. Tanto el entorno natural como las viviendas han sufrido un impacto devastador, dejando a numerosas familias y comercios en una situación crítica. El Ministerio Público Fiscal (MPF) ha señalado que se están desarrollando investigaciones para determinar el origen del incendio, mientras que el daño causado ha sido calificado como “enorme”.
El incendio ha resaltado la urgencia de implementar medidas de prevención y respuesta más efectivas en áreas susceptibles a incendios forestales, especialmente en regiones como Chubut. Con el cambio climático generando patrones climáticos extremos, los incendios se están volviendo cada vez más comunes, exigiendo a las autoridades estar mejor preparadas y contar con recursos suficientes para enfrentar estas catástrofes.
Los esfuerzos de extinción continúan, y la llegada de las esperadas lluvias traerá una mezcla de esperanza y precaución. Si bien la lluvia podría ayudar a controlar el avance de las llamas, los vientos siguen siendo un factor de riesgo significativo que podría reavivar el fuego en áreas ya afectadas.
La comunidad está en alerta y se mantiene solidaria ante la adversidad, ya que muchas familias se enfrentan a la pérdida de sus hogares y a la desesperación que trae consigo un desastre de esta magnitud. Las autoridades locales y nacionales están trabajando de la mano para proporcionar asistencia y apoyo a los afectados, mientras que los residentes se preparan para enfrentar los desafíos que vienen.
La situación en Epuyén es un recordatorio del poder destructivo de la naturaleza y la importancia de la prevención y la respuesta rápida frente a emergencias ambientales. Con la situación aún crítica, la comunidad y los equipos de rescate continúan aferrándose a la esperanza de un pronto control del incendio.