Ya rige la baja del Impuesto PAÍS: qué espera el Gobierno


El Gobierno oficializó la reducción de la alícuota del impuesto PAIS del 17,5% al 7,5% sobre el uso de dólares para el pago de importaciones y fletes desde el exterior, tal como fue publicado en el Boletín Oficial a través del decreto 777/2024 en las primeras horas de este lunes. Esta decisión busca retornar la tasa al nivel previo al cambio de mando en diciembre pasado, con el objetivo de influir en los precios y la recaudación, mientras que el mercado evalúa el potencial incremento en la demanda de divisas para importaciones.

La reducción impositiva había sido prometida durante el tratamiento de la Ley de Bases, donde el Ejecutivo se comprometió a activarla si el Congreso aprobaba la normativa. Dos meses después, la medida entra en vigor, afectando variables clave para la economía. El decreto establece que la alícuota se reduce al 7,5% en las operaciones de compra de divisas para el pago de obligaciones por importación de bienes y servicios de transporte en comercio exterior.

El equipo económico del Gobierno espera que esta medida de reducción del Impuesto PAÍS ayude a frenar la inercia inflacionaria que caracterizó los últimos tres meses, con subas de precios núcleo estables. La apuesta es que septiembre muestre un ritmo de inflación más bajo que los registrados en julio (4%) y agosto, mes en el que el ministro Luis Caputo anticipó una cifra similar.

Perspectivas del mercado por el Impuesto PAÍS

El impacto sobre los precios es visto con escepticismo por el mercado. Consultoras como LCG consideran que el efecto en la inflación será difícil de medir y probablemente no se traduzca en bajas nominales de precios, sino en un freno en los ajustes programados. Otra firma, 1816, sugiere que el impacto será más claro en los precios mayoristas, especialmente en productos importados y manufacturados nacionales con componentes importados.

Históricamente, estudios como los del Banco Provincia indican que las apreciaciones cambiarias no suelen tener un efecto directo en la reducción de precios, sino que moderan la dinámica futura de la inflación. Este punto de vista es compartido por el Grupo IEB, que considera que el impacto en precios podría ser más diferido, ofreciendo un “colchón” para evitar remarcaciones inmediatas sin pérdida de márgenes.

Impuesto PAÍS, Luis Caputo, inflación

Impacto fiscal y cambiario

En términos fiscales, la baja del impuesto PAIS representa una disminución en la recaudación del 0,4% del PBI, según estimaciones de LCG e Invecq. Aunque esto significa una pérdida de aproximadamente USD 2.500 millones en lo que resta del año, no se espera que comprometa seriamente el objetivo de equilibrio fiscal, considerando las compensaciones previstas por otras medidas fiscales.

En el aspecto cambiario, la reducción del impuesto podría incentivar una mayor demanda de divisas para importaciones. Se espera que el “dólar importador” baje de $1.120 a $1.024, lo que podría aumentar las compras externas en un contexto de recuperación económica y bajo el nuevo esquema de pagos. Invecq anticipa que el saldo comercial de bienes podría ser negativo en más de USD 4.000 millones entre septiembre y noviembre, debido a la mayor demanda de divisas.

La baja del impuesto PAIS es una medida que apunta a reducir la inflación y estimular las importaciones, aunque con efectos potencialmente mixtos. Mientras que podría contribuir a moderar los precios en el corto plazo, también presenta desafíos para la estabilidad cambiaria y la recaudación fiscal. La implementación de esta medida busca colaborar con el objetivo de reducir la inflación mensual, aunque su impacto final dependerá de cómo se desarrollen las dinámicas de importación y demanda de divisas en los próximos meses.