Ganadería: noviembre marcó una inflexión para el mercado de la carne


El mercado de la ganadería y la carne en Argentina mostró en noviembre una notable aceleración en los precios de la hacienda y en los cortes vacunos ofrecidos en carnicerías, impulsado por una menor oferta de ganado y la proximidad de las fiestas de fin de año. Por primera vez en meses, estas subas superaron los índices de inflación, marcando una inflexión en el sector ganadero.

Incrementos en la hacienda: menor oferta, mayor presión

Según el informe mensual de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra), el precio de la hacienda en pie aumentó un 7,6% mensual, frente a una inflación general del 2,4% reportada por el INDEC. Este salto se dio en un contexto de menor disponibilidad de animales, con una caída del 6,9% en el volumen comercializado respecto al mes anterior.

La menor oferta se sintió especialmente en las categorías jóvenes, como los novillitos, cuya cantidad comercializada cayó un 9,9%, mientras que sus precios aumentaron un 8,9%. En el caso de las vacas regulares, las ventas disminuyeron un 2,4%, pero los valores subieron un 7%.

Por otro lado, las categorías especiales jóvenes de más de 430 kilos fueron las únicas en registrar un aumento del 2,5% en la cantidad de cabezas comercializadas, con un incremento de precios más moderado del 3,5%.

En términos de precios en dólares, los valores de la hacienda mostraron una suba del 5,4% al tipo de cambio oficial y del 12,6% al dólar informal, alcanzando el nivel más alto en siete años.

En el mercado minorista, los precios de los cortes de carne reflejaron las subas de la hacienda. Según Ciccra, el precio promedio de los cortes vacunos aumentó un 2,8% en noviembre, liderado por el asado, que se encareció un 4,6%. Otros cortes destacados incluyeron la nalga (+3,6%), el cuadril (+2,7%) y la carne picada común (+2,1%).

En un análisis interanual, el precio promedio del kilo de carne vacuna relevado por el INDEC creció un 114,8%, el menor ritmo en 16 meses. Sin embargo, este incremento fue superado por el pollo entero, que subió un 135,9% anual, reflejando una presión inflacionaria generalizada en el sector de alimentos.

Ecuador, carne vacuna, exportación, ganadería

Fiestas y menor oferta en ganadería: los motores detrás de la suba

La cercanía de las fiestas de fin de año y una baja en la oferta de hacienda fueron factores clave en esta dinámica de la ganadería. Ciccra destacó que la disminución en la disponibilidad de animales jóvenes y vacas regulares tuvo un impacto directo en los precios, que se aceleraron en un contexto de demanda sostenida.

Además, el informe subraya que la brecha entre los precios de la hacienda en dólares oficiales y “libres” se redujo al 13,7%, la cifra más baja desde agosto de 2019, lo que refleja un mercado presionado tanto por factores locales como por las dinámicas cambiarias.

A pesar de las subas, los precios de la ganadería aún no logran empatar el ritmo de la inflación en el acumulado anual. Según el INDEC, la variación interanual del Índice de Precios al Consumidor en el Gran Buenos Aires fue del 170,1%, mientras que el sector de carnes y derivados mostró un incremento del 127,8%.

En este contexto, el consumo de carne sigue enfrentando desafíos, con una marcada retracción en el poder adquisitivo de los consumidores y un cambio hacia alternativas más económicas, como el pollo y los productos congelados, que también experimentaron incrementos significativos.

Con las fiestas navideñas acercándose, se espera que las subas en los precios de la carne continúen, impulsadas por la alta demanda estacional y la persistente escasez de oferta. Este escenario plantea interrogantes sobre la sostenibilidad del consumo interno y los desafíos para equilibrar el mercado en un contexto económico marcado por la inflación y la inestabilidad.

El sector ganadero, mientras tanto, enfrenta el reto de ajustar su dinámica productiva para atender la demanda sin descuidar la recuperación de su rentabilidad, que comienza a mostrar signos de mejora tras meses de rezago frente a la inflación.