Ganadería: la calidad del agua, un factor decisivo para la producción

La calidad del agua utilizada para la bebida de la ganadería se posiciona como una de las variables clave para mejorar la productividad en los campos del este rionegrino. Así lo confirma un ambicioso proyecto liderado por técnicos de la Estación Experimental Agropecuaria INTA Valle Inferior del Río Negro (EEAVI), en colaboración con las agencias de extensión rural de San Javier, General Conesa y Valcheta. El objetivo es claro: analizar en profundidad la composición del agua en campos de secano y brindar herramientas concretas a los productores para optimizar el rendimiento reproductivo y nutricional de sus rodeos.
Desde hace años, los productores de la región enfrentan dificultades asociadas con la salinidad y la presencia de minerales en el agua que utilizan en sus establecimientos. Estudios previos, realizados tanto por laboratorios públicos como privados, ya habían detectado niveles elevados de ciertos compuestos que inciden negativamente en la salud y productividad del ganado. Sin embargo, hasta ahora no existía una caracterización detallada por zonas ni un enfoque sistemático para abordar el problema.
El nuevo proyecto, que comenzó con la recolección de muestras durante el verano y el otoño, apunta precisamente a eso. Se están tomando muestras en establecimientos donde ya se habían reportado problemas como bajas tasas de preñez o escaso aumento de peso en categorías de recría, lo que permitirá establecer patrones de calidad del agua en distintos sectores y diseñar estrategias de manejo diferenciadas.
“Conocer qué minerales están presentes en el agua, y en qué proporciones, es fundamental. Esto nos permitirá determinar si es necesaria una suplementación mineral específica”, explicó Gabriela Garcilazo, técnica de la EEAVI.

Agua, un componente olvidado de la nutrición animal en la ganadería
En general, los productores prestan atención a la calidad de los alimentos que brindan a sus animales, ya sea en forma de pasturas o suplementos balanceados. Sin embargo, el agua —principal insumo en la dieta diaria— suele ser subestimada, a pesar de su aporte de minerales esenciales que intervienen en procesos hormonales, inmunológicos y reproductivos.
El análisis del agua permite detectar tanto déficits como excesos de minerales. Algunos pueden ser compensados mediante suplementos en bloques o bateas, o incluso con aplicaciones inyectables. Pero el problema aparece cuando se suplementa “a ciegas”, sin conocer la verdadera composición del agua que consume el rodeo. Esto puede llevar a generar toxicidad o desequilibrios nutricionales que no necesariamente provocan la muerte de los animales, pero sí afectan su desempeño reproductivo o productivo de forma silenciosa.
Valores recomendados y primeros resultados
Según detalló Mariana Dacal, de la Agencia de Extensión INTA General Conesa, los valores ideales de sales totales disueltas en el agua de bebida para rodeos de cría oscilan entre 2000 y 4000 mg/L. Estos parámetros pueden ser medidos en el campo mediante conductímetros manuales o mediante análisis más detallados en laboratorios especializados.

En los muestreos recientes, los valores de sales totales encontrados variaron entre 4760 mg/L y 14910 mg/L, cifras que superan ampliamente el rango aconsejado. En esos casos, es clave identificar qué tipo de minerales predominan, ya que algunos tienen mayor tolerancia, mientras que otros pueden resultar tóxicos incluso en concentraciones bajas.
El proyecto también incluye el relevamiento de signos externos en el comportamiento o el aspecto físico de los animales, para asociarlos a posibles desequilibrios minerales. Este trabajo permitirá generar materiales de difusión claros y accesibles, orientados a los productores, con estrategias para detectar, analizar y mitigar los efectos negativos del agua de mala calidad.
Finalmente, Mariana Dacal convocó a los productores a acercarse al laboratorio de la Estación Experimental para conocer cómo tomar correctamente las muestras de agua o contactarse por redes sociales para recibir asesoramiento técnico. “Este diagnóstico nos permitirá generar herramientas concretas para mejorar la performance productiva y sanitaria del rodeo en la región”, señaló.
Así, este enfoque integral sobre la calidad del agua se presenta como una oportunidad estratégica para el desarrollo ganadero sostenible en el este de Río Negro, poniendo en valor un recurso que, aunque a menudo olvidado, resulta indispensable para el éxito de la actividad.
Fuente: TodoAgro