Exportaciones: el plan de Javier Milei para duplicar el ingreso en 2025
El presidente Javier Milei confirmó este domingo que no reducirá ni eliminará los derechos de exportaciones (retenciones) para el próximo ciclo 2024/25, una medida que generó expectativas y debates en el sector agropecuario. En su discurso ante el Congreso, durante la presentación del proyecto de Presupuesto 2025, quedó claro que las retenciones seguirán siendo parte integral de la política fiscal del gobierno, lo que representa un golpe para los productores agropecuarios que esperaban alivios impositivos.
Cómo podría llegar Javier Milei al objetivo de duplicar las exportaciones
El sector agropecuario, que enfrenta desafíos como la baja de precios internacionales y el aumento de los costos productivos, había expresado la necesidad de una reducción gradual de las retenciones. Sin embargo, el gobierno no incluyó ninguna modificación en este aspecto, ratificando que no es prioridad eliminar esta “extracción extraordinaria de capital” aplicada a las exportaciones agrícolas.
Uno de los puntos más llamativos del proyecto de Presupuesto 2025 es que el gobierno prevé un aumento del 100% en la recaudación por derechos de exportación para el próximo año. Esta proyección contrasta con la inflación proyectada del 18,3% y una previsión de tipo de cambio de 1207 pesos por dólar para fines de 2025, frente al nivel actual de 980 pesos por dólar.
Este aumento en la recaudación por retenciones plantea varias preguntas. Si el gobierno no planea devaluar la moneda de manera significativa, ¿cómo se podría duplicar la recaudación? Algunas posibles respuestas incluyen un incremento en las alícuotas de las retenciones, la extensión de su aplicación a otros sectores productivos, o bien, un aumento en la base imponible derivado de la subida de precios de los productos agroindustriales.
Si, por otro lado, el escenario es devaluatorio, podría esperarse que el gobierno esté considerando una unificación cambiaria que incremente la competitividad de las exportaciones y, en consecuencia, la recaudación por retenciones. Sin embargo, cualquier plan de devaluación no sería comunicado de antemano, ya que esto podría provocar movimientos especulativos en el mercado.
Otra opción sería una combinación de factores, como una devaluación acompañada de una mejora en los precios internacionales de los productos agropecuarios, lo que impulsaría las exportaciones y, con ellas, los ingresos fiscales.
El debate sobre las retenciones fue un tema recurrente en la agenda económica argentina, especialmente en un contexto donde el campo es uno de los principales motores de la economía. A pesar de las expectativas, Milei dejó claro que no planea modificar el esquema impositivo vigente, lo que representa una continuidad de la carga fiscal para el sector.
El equipo económico del gobierno, liderado por Milei, parece estar apostando a un escenario en el que el tipo de cambio se mantenga relativamente estable, pero donde la inflación y el crecimiento de los precios internacionales de los productos agrícolas jueguen un papel central en el aumento de la recaudación.
El gobierno no planea eliminar ni reducir las retenciones en el corto plazo, a pesar de las promesas de alivio fiscal que esperaban los productores. La proyección de duplicar la recaudación por derechos de exportación para 2025 dependerá en gran medida de factores externos como los precios internacionales y posibles ajustes en el tipo de cambio, lo que genera incertidumbre en el sector agropecuario.
