Entre Ríos: el difícil escenario de la soja y los cultivos
Un reciente análisis de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (BolsaCER), en relación a la soja, el trigo y las actividades agropecuarios, junto con la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) expone la compleja situación económica que enfrentan los productores agrícolas en la región. A través del estudio, se identificaron las cotizaciones necesarias para cubrir los costos de producción de los principales cultivos, concluyendo que solo el maíz presenta un panorama relativamente favorable, mientras que la soja y el trigo enfrentan serias dificultades.
Precios necesarios para cubrir costos
El informe estima las cotizaciones mínimas necesarias para cubrir costos considerando rendimientos históricos promedio y las proyecciones para la campaña 2024/25. Sin embargo, tanto para soja como para trigo, los precios proyectados no alcanzan estos valores mínimos, agravando el escenario financiero de los productores:
- Soja: Según el análisis, la cotización necesaria para cubrir los costos en una producción arrendada debería ser de US$ 319 por tonelada. Sin embargo, el precio futuro proyectado en el mercado MATBA Rofex a mayo de 2025 es un 2,5% inferior a los valores actuales, lo que indica que no se alcanzará el punto de equilibrio.
- Trigo: Aunque se proyecta un aumento del 6,1% en la cotización a tres meses, alcanzando un máximo de US$ 209 a julio de 2025, este incremento es insuficiente para cubrir los costos en producciones arrendadas.
El análisis destaca que la combinación de costos altos y rendimientos históricos promedio ubica a ambos cultivos en una posición económicamente inviable bajo las condiciones actuales.
Maíz: el único cultivo con margen positivo
En contraste, el maíz es el único cultivo que, en base a su rendimiento histórico, logra superar los costos en un escenario de producción arrendada.
- El precio proyectado más bajo para el maíz es de US$ 174,5 (posición julio 2025), que, aunque representa una caída con respecto a los valores actuales, sigue superando el precio de indiferencia.
- Sin embargo, el informe advierte que la tendencia a la baja en las cotizaciones podría neutralizar las ventajas económicas que otorgan los rendimientos, afectando levemente la rentabilidad de este cultivo.
Factores que agravan la situación
El análisis subraya varios factores estructurales que contribuyen al escenario adverso para la soja y el trigo:
- Costos de arrendamiento elevados: La producción en campos arrendados incrementa significativamente la presión sobre los márgenes de los agricultores.
- Rendimientos históricos insuficientes: Los rindes promedio no alcanzan los niveles necesarios para cubrir costos en la mayoría de los casos.
- Proyecciones de precios desalentadoras: Tanto para la soja como para el trigo, las cotizaciones futuras reflejan caídas o incrementos marginales que no logran compensar los costos.
El informe refleja un panorama desafiante para los productores agrícolas en Entre Ríos, donde el maíz se presenta como la opción más viable, aunque no exenta de riesgos. Para los cultivos de soja y trigo, las condiciones actuales no permiten cubrir costos bajo las proyecciones de precios y rendimientos históricos.
Ante este contexto, se destacan dos posibles vías de acción:
- Estrategias de eficiencia: Implementar prácticas que reduzcan costos o incrementen rendimientos puede ser clave para mejorar la competitividad.
- Políticas de apoyo: La intervención gubernamental o incentivos económicos podrían aliviar la presión sobre los productores y fomentar la sostenibilidad de la producción agrícola en la región.
El análisis completo incluye gráficos comparativos que muestran las cotizaciones históricas y proyectadas, así como los rendimientos necesarios para alcanzar el equilibrio económico en cada cultivo. Estos datos ofrecen un diagnóstico claro y urgente para los tomadores de decisiones en el sector agropecuario.
