Descubrimiento del Conicet revoluciona la biotecnología agrícola en este 2025


Un grupo de científicos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), pertenecientes al Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario (IBR), ha realizado un hallazgo clave que podría transformar las técnicas de mejoramiento vegetal. Su investigación, liderada por el doctor Javier Palatnik, identificó un mecanismo molecular que permite la regeneración y multiplicación de plantas fértiles a partir de células modificadas genéticamente.

Este avance del Conicet, que ha sido publicado en la prestigiosa revista Nature Plants, podría ser crucial para el sector agrobiotecnológico. De acuerdo con el Conicet, la investigación permitiría desarrollar herramientas que faciliten la obtención de plantas completas a partir de unas pocas células, resolviendo uno de los principales desafíos de la ingeniería genética aplicada a la agricultura.

Un problema crítico en la modificación genética

La modificación genética de las plantas es una técnica ampliamente utilizada y relativamente accesible, pero presenta una gran dificultad: transformar esas primeras células modificadas en plantas completas y fértiles que puedan multiplicarse. La investigación del equipo de Palatnik podría representar una solución clave para las principales empresas agrobiotecnológicas, que buscan garantizar la regeneración eficiente de especies vegetales modificadas.

Conicet, descubrimiento

El mecanismo molecular descubierto por el Conicet

El estudio del Conicet reveló la existencia de un sistema de dos componentes moleculares que controlan este proceso. En primer lugar, las proteínas reguladoras del crecimiento denominadas GRFs, que desempeñan un papel fundamental en la expresión de genes responsables de la formación de hojas, tallos y raíces. En segundo lugar, un tipo de molécula de ácido nucleico llamada microARN, que regula la presencia y cantidad de GRFs en las células.

“Fuimos los primeros en el mundo en estudiar este sistema”, afirmó Palatnik, quien ya cuenta con tres patentes desarrolladas en colaboración con el sector privado y difundidas en Estados Unidos y China. Para llegar a este descubrimiento, el equipo de investigación invirtió aproximadamente 1000 horas de trabajo en el microscopio de fluorescencia y realizó numerosos experimentos con equipamiento de la Universidad de Heidelberg en Alemania.

Conicet, descubrimiento

El hallazgo del Conicet podría tener una influencia significativa en la industria de las semillas y el mejoramiento genético vegetal. La posibilidad de regenerar plantas fértiles a partir de células modificadas podría optimizar los procesos de selección y desarrollo de cultivos mejorados, lo que beneficiaría tanto a productores como a empresas semilleras.

Este avance podría traducirse en mejoras en la eficiencia de los cultivos, mayor resistencia a enfermedades y condiciones climáticas adversas, así como una optimización de los recursos utilizados en la producción agropecuaria.

El equipo de Palatnik continuará sus investigaciones para profundizar en la aplicación de este descubrimiento en cultivos de interés comercial y explorar nuevas estrategias para la optimización del proceso de regeneración de plantas. Mientras tanto, el hallazgo ya ha despertado el interés de las principales compañías agrobiotecnológicas, que podrían incorporar esta tecnología en el desarrollo de nuevas variedades de semillas en el futuro.