Cosecha 2023/24: la liquidación de granos superó el 50%


Las exportaciones de productos del complejo sojero y de maíz registraron un notable incremento del 65% durante el primer semestre de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior. Sin embargo, el aumento en el volumen exportado no se traduce en mayores ingresos de divisas debido a la caída en los precios internacionales.

Incremento en la exportaciones de granos

Según datos de la Bolsa de Cereales de Córdoba, hasta junio de 2024 se comercializó el 53% de la producción estimada de maíz y el 47% de la de soja. La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) informan que la liquidación de divisas alcanzó los 11.024 millones de dólares, lo que representa el nivel más bajo en los últimos cuatro años.

Hasta la fecha, se exportaron aproximadamente 36,5 millones de toneladas combinadas de productos del complejo sojero (porotos, aceite y harina) y maíz en grano. Este volumen es un incremento significativo del 65% respecto al primer semestre de 2023 y supera los 34 millones de toneladas exportadas durante el primer semestre de 2022, que fue el periodo con el mayor ingreso de divisas en los últimos cuatro años.

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Impacto de los precios internacionales

A pesar del aumento en el volumen de exportaciones, los precios de los granos experimentaron una caída considerable. La Bolsa de Cereales de Córdoba señala que esta disminución en los ingresos de divisas no se debe a una falta de liquidación por parte del sector agropecuario, sino a los precios más bajos de exportación en comparación con períodos anteriores.

Los menores precios internacionales deterioraron el poder de compra de los productos del sector, limitando los ingresos que se obtienen a pesar del incremento en el volumen exportado. La caída en los precios refleja una tendencia global que afecta a la rentabilidad de las exportaciones argentinas de soja y maíz.

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El sector agropecuario argentino enfrenta un desafío doble: aumentar la eficiencia en la producción y comercialización mientras lidia con un entorno de precios internacionales volátiles. La situación exige una estrategia adaptativa que permita maximizar los ingresos a pesar de las fluctuaciones en el mercado global.