Colza: duplica el precio de trigo y genera una gran oportunidad para Argentina
La colza, un cultivo que tuvo altibajos en Argentina, está ganando terreno nuevamente, especialmente en la provincia de Entre Ríos, que lidera la producción. Actualmente, la superficie sembrada de colza en el país oscila entre 25.000 y 30.000 hectáreas, y aunque su rendimiento es inferior al del trigo, el valor económico de la oleaginosa la convierte en una opción rentable para los productores.
Primer simposio de colza de Argentina
El Primer Simposio de Colza de Argentina, organizado por el INTA, subrayó la importancia de este cultivo como la segunda oleaginosa más relevante a nivel mundial, después de la soja. A pesar de que comparte la misma época de siembra con el trigo, existen diferencias importantes entre ambos cultivos. Según Leonardo Coll, profesional del INTA Paraná, aunque la colza tiene un rendimiento menor, su valor comercial es significativamente más alto, lo que permitió su continuidad a pesar de la reducción de superficie.
Coll detalló que la colza rinde entre 17 y 18 quintales por hectárea, lo cual es inferior al trigo, pero destacó que en Entre Ríos puede ser igual de rentable o incluso más. Esto se debe a que el precio de la colza suele ser el doble o más que el del trigo, lo que compensa su menor producción.
Costos y manejo del cultivo
En cuanto a los costos operativos, Coll explicó que la colza requiere una inversión similar a la del trigo, aunque con un mayor énfasis en la fertilización, debido a sus altas exigencias nutricionales. El cultivo demanda nitrógeno, fósforo y azufre en cantidades considerables, lo que eleva los costos en comparación con otros cultivos invernales.
El manejo de la siembra y la cosecha también requiere atención especial. La colza, por ser una semilla pequeña, necesita un buen contacto con el suelo y la utilización de herramientas como barre rastrojos para evitar interferencias durante la siembra. En la cosecha, es crucial evitar pérdidas, ya que las vainas de la colza tienden a abrirse cuando están maduras, lo que puede ocasionar la caída de las semillas si no se cosecha a tiempo y con cuidado.
Colza y soja de segunda: una combinación prometedora
Uno de los aspectos más destacados del simposio fue la investigación sobre la doble cosecha de colza y soja de segunda, llevada a cabo por el INTA Paraná. Este estudio mostró que la colza, al liberar el lote antes que el trigo, permite sembrar soja de segunda en fechas casi óptimas, lo que mejora el rendimiento total del campo. Las combinaciones de ciclos cortos de colza y fechas de siembra tardías superaron los 4500 kg/ha, ubicando el periodo crítico de crecimiento en condiciones ambientales favorables y permitiendo una correcta implantación de la soja.
El estudio concluyó que la siembra de colza de ciclo corto a mediados de mayo produjo los mejores rendimientos tanto para la colza como para el doble cultivo con soja de segunda. Además, la estructura radicular de la colza la convierte en una excelente antecesora de otros cultivos, facilitando la rotación con cultivos más tradicionales como las gramíneas.
Colza en Entre Ríos: un bastión de la oleaginosa
A lo largo de los años, la colza perdió protagonismo en otras regiones de Argentina, pero Entre Ríos sigue siendo un bastión clave para este cultivo. Aunque la colza puede sembrarse en toda la zona núcleo, el centro y sureste de Entre Ríos concentran la mayor parte de la producción.
Este éxito en Entre Ríos se debe en parte a un paquete de manejo adaptado localmente desarrollado por el INTA, así como a la facilitación de aspectos logísticos y comerciales por parte de una empresa local. Los productores de la región tienen años de experiencia con la colza, lo que les permitió optimizar sus prácticas y obtener buenos rendimientos.
En resumen, la colza está resurgiendo en Argentina, especialmente en Entre Ríos, donde su rentabilidad y el desarrollo de técnicas de manejo adaptadas localmente están contribuyendo a su crecimiento. La investigación sobre su combinación con soja de segunda y sus altos precios en el mercado posicionan a la colza como una opción viable y rentable para los productores argentinos.
