Alerta: qué pasará con el clima y La Niña para el campo
El sector productivo está en alerta debido a la falta de lluvias, y el pronóstico de este jueves no trajo las precipitaciones esperadas, alcanzando solo a un área limitada. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), “tiene que llover para asegurar lo sembrado en maíz y evitar que siga aumentando el trigo bajo condición regular a mala”.
Hasta ahora se han sembrado 500.000 hectáreas de maíz, pero para garantizar el correcto nacimiento de las plantas, se requieren entre 15 y 20 milímetros de agua y mejoras del clima. La BCR destaca que hay menos humedad en los perfiles del suelo en la región núcleo en comparación con el año anterior, tras haber pasado por tres años de condiciones de La Niña.
Tormenta sin lluvias
La reciente tormenta que atravesó la región prometía traer entre 10 y 15 milímetros de lluvia, pero resultó en acumulaciones mínimas. En localidades como Lincoln, Junín, Rojas, Pergamino y Baradero, solo se registraron entre 4 y 6 milímetros, lejos de las expectativas iniciales. A pesar de pronósticos que anticipaban de 30 a 50 milímetros y alertas para nueve provincias, solo una fracción de Buenos Aires recibió algo de lluvia.
Mientras que de Trenque Lauquen a Pergamino sí se registraron precipitaciones, el norte de la región quedó seco. “Para la región núcleo, el frente ya pasó de largo, aunque no se descartan remanentes”, mencionaron. Sin embargo, la inestabilidad atmosférica se mantendrá, con pronósticos de lluvias aisladas y dispersas para el domingo y el martes. “Hace 90 días que no había posibilidades de tres eventos de lluvias en menos de una semana”, afirmó el consultor Alfredo Elorriaga.
El desafío del trigo
En cuanto al trigo, la demanda de agua se vuelve cada vez más crítica a medida que las plantas entran en su período crítico de desarrollo. Actualmente, el 5% de los lotes ya está desplegando la hoja bandera, el 60% se encuentra encañando y el 35% todavía está en fase de macollaje. Los técnicos subrayan que, para que el trigo continúe en carrera hacia buenos rendimientos, se necesitan al menos 15 a 20 milímetros de lluvia. De lo contrario, el deterioro de los cultivos en el oeste podría llevar a que algunos lotes se consideren perdidos.
La situación actual plantea un desafío significativo para los productores, que enfrentan la presión de las condiciones climáticas en un momento crítico para la campaña agrícola.
