Chaco y Santa Fe: El Gobierno declaró la emergencia agropecuaria por sequía 2025

El Ministerio de Economía de la Nación oficializó este miércoles la declaración de emergencia agropecuaria para las provincias de Chaco y Santa Fe, a raíz de los severos efectos provocados por las altas temperaturas y la prolongada sequía que afectaron a las explotaciones agrícolas, ganaderas y apícolas en ambas regiones.
Las claves de la emergencia agropecuaria en Chaco y Santa Fe
La medida, comunicada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, fue establecida mediante las Resoluciones 504/2025 y 506/2025, firmadas por el ministro de Economía, Luis Caputo. La decisión busca asistir a los productores afectados y garantizar la aplicación de los beneficios previstos en la Ley 26.509 de Emergencias Agropecuarias.

En el caso de Chaco, la declaración de emergencia rige desde el 28 de marzo hasta el 24 de septiembre de 2025 para todas las explotaciones agrícolas, ganaderas y apícolas del territorio provincial. La resolución nacional convalida el Decreto Provincial N° 410/2025, emitido anteriormente por las autoridades locales.
Por su parte, en Santa Fe, la medida entró en vigor el 1° de marzo y se extenderá hasta el 31 de agosto de 2025. La declaración alcanza a las explotaciones agropecuarias afectadas por la sequía en distintas zonas del territorio santafesino. Además, el Gobierno nacional resolvió prorrogar la emergencia dispuesta previamente por la Resolución 1297/2024 —emitida el 29 de noviembre de 2024— para las explotaciones ya alcanzadas por el fenómeno climático.
La declaración de emergencia implica una serie de beneficios fiscales y financieros para los productores afectados, entre ellos la postergación o exención del pago de impuestos nacionales y el acceso a líneas de crédito especiales para la recuperación de las actividades productivas.
La definición de las áreas afectadas y la extensión temporal de las medidas fueron establecidas en el marco de reuniones de la Comisión Nacional de Emergencias y Desastres Agropecuarios (CNEyDA). En estos encuentros, se evaluaron los informes técnicos y climáticos de las zonas damnificadas, con el objetivo de diseñar respuestas acordes a la gravedad de la situación.

Participaron de las deliberaciones miembros estables de la Comisión en representación de organismos nacionales, entre ellos el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), las carteras de Interior y Economía, el Banco Central de la República Argentina (BCRA), la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y el Banco Nación. También estuvieron presentes representantes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), entidades agropecuarias y técnicos provinciales.
Desde la Secretaría de Agricultura destacaron que el trabajo conjunto entre las provincias afectadas, los organismos técnicos y el Gobierno nacional fue clave para agilizar la declaración de emergencia y permitir que los productores puedan acceder rápidamente a los beneficios que establece la legislación vigente.
La crisis climática que atraviesan Chaco y Santa Fe no es un hecho aislado: en los últimos años, fenómenos extremos como sequías prolongadas, olas de calor e inundaciones han afectado recurrentemente a las zonas agrícolas del país, golpeando las producciones y generando pérdidas millonarias.

Por este motivo, distintos sectores productivos insisten en la necesidad de contar con políticas públicas que no solo atiendan las emergencias, sino que también promuevan medidas de prevención y adaptación frente al cambio climático.
Con esta resolución, el Gobierno busca amortiguar los efectos inmediatos de la sequía sobre los productores afectados, aunque los desafíos a largo plazo para el sector agropecuario siguen siendo importantes.