Carne vacuna 2025 en alerta por la investigación de China
China, el mayor importador y consumidor de carne vacuna del mundo, ha anunciado una investigación sobre las importaciones de este producto. La medida busca evaluar el impacto de las crecientes importaciones en el mercado interno, donde los precios han caído a mínimos históricos, generando preocupación entre los productores locales.
Impacto en el campo argentino
Argentina, junto con Brasil y Australia, figura entre los principales proveedores de carne vacuna para China. En 2024, el 78,8% de las exportaciones argentinas de carne vacuna se dirigieron al gigante asiático, según datos del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC). Las ventas hacia este mercado alcanzaron un volumen total de 533.005 toneladas métricas en los primeros 11 meses del año, un 10% más que en el mismo período de 2023.
Sin embargo, los precios promedio de exportación han mostrado una marcada tendencia a la baja, situándose en 3.530 dólares por tonelada en noviembre de 2024, lejos del pico de 5.900 dólares por tonelada registrado en mayo de 2022. Esto refleja un mercado con exceso de oferta que ha debilitado el poder de negociación de los exportadores.
La investigación abarcará productos importados entre enero de 2019 y junio de 2024, como carne fresca, congelada y deshuesada. Según el Ministerio de Comercio chino, las importaciones de carne vacuna aumentaron un 65% entre 2019 y 2023, alcanzando 2,6 millones de toneladas en 2024, lo que representa el 30,9% del mercado interno.
La Asociación de Ganadería de China denunció que estas importaciones han causado un “daño sustancial” a los productores locales. “La mayoría de las granjas de ganado vacuno de China se encuentran en una situación deficitaria”, destacaron, atribuyendo el problema a la caída de los precios internos, que han retrocedido un 22% en los últimos dos años.
Posibles consecuencias para Argentina
La investigación podría derivar en medidas para restringir las importaciones, como aranceles adicionales o cuotas, lo que impactaría directamente en los exportadores argentinos. Esto se suma a un panorama global complejo, donde otros mercados clave, como la Unión Europea, enfrentan también posibles restricciones comerciales.
Si bien el Ministerio de Comercio chino aclaró que la investigación no está dirigida a países específicos y no interrumpirá el comercio durante su desarrollo, los exportadores argentinos deberán diversificar mercados y prepararse para posibles cambios en la demanda china.
La relación comercial con China ha sido fundamental para el sector cárnico argentino en los últimos años. Sin embargo, este nuevo escenario plantea un desafío para los productores y exportadores, que deberán adaptarse a un contexto en el que la sobreoferta y las tensiones comerciales complican el acceso a uno de los mercados más importantes del mundo.