El consumo de carne vacuna en Argentina registró una caída histórica en 2024
El año 2024 marcó un hito negativo en la historia del consumo de carne vacuna en Argentina. Según los últimos datos publicados por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), el consumo aparente por habitante se redujo un 9% respecto al año anterior, ubicándose en 47,7 kilogramos por año. Esta cifra representa el segundo registro más bajo desde que se iniciaron los registros en 1914, solo superado por el año 1920.
Factores que influyeron en la disminución del consumo de carne
Varios factores confluyeron para explicar esta significativa caída en el consumo de carne vacuna:
- Aumento de los precios: La inflación y el incremento en los costos de producción impactaron directamente en el precio final de la carne, reduciendo el poder adquisitivo de los consumidores y limitando su acceso a este producto.
- Competencia de otros alimentos: La mayor oferta de otros alimentos, como las proteínas vegetales, y la creciente conciencia sobre una alimentación más saludable, también influyeron en la disminución del consumo de carne.
- Reducción del poder adquisitivo: La crisis económica y la pérdida del poder adquisitivo de los argentinos limitaron el gasto en alimentos, priorizándose productos de primera necesidad.
A pesar de la caída del consumo interno, la producción de carne vacuna argentina mantuvo un nivel elevado, impulsada principalmente por las exportaciones. Según el informe del mercado ganadero de Rosario (ROSGAN), la industria frigorífica produjo un total de 3,177 millones de toneladas de carne vacuna en 2024. De este total, un volumen récord de 936,1 mil toneladas fue destinado a los mercados internacionales.
La fuerte demanda externa, especialmente de países asiáticos, permitió sostener los precios de la hacienda y mantener la actividad en el sector. Sin embargo, el aumento de las exportaciones no fue suficiente para compensar la caída del consumo interno.
Impacto en el sector ganadero
La disminución del consumo interno y el aumento de las exportaciones generaron un escenario complejo para el sector ganadero argentino. Por un lado, los productores se vieron beneficiados por los altos precios internacionales de la carne, pero por otro lado, enfrentaron desafíos relacionados con la disponibilidad de insumos y la logística.
La recuperación del consumo de carne vacuna en Argentina dependerá de diversos factores, entre los que se destacan:
- La evolución de la economía: Una mejora en el poder adquisitivo de los consumidores será fundamental para reactivar el consumo interno.
- Los precios de la carne: Una reducción en los precios al consumidor será clave para incentivar la demanda.
- Las políticas públicas: Las medidas gubernamentales destinadas a fomentar la producción y el consumo de carne vacuna también jugarán un papel importante.
El año 2024 fue un año desafiante para el sector de la carne vacuna en Argentina. La caída del consumo interno, si bien fue compensada en parte por el aumento de las exportaciones, plantea interrogantes sobre el futuro de esta importante actividad económica. Será fundamental que los actores involucrados trabajen en conjunto para encontrar soluciones que permitan recuperar el consumo interno y asegurar la sostenibilidad del sector.
