Campaña gruesa: el clima traería alivio para el campo


En los últimos meses, las proyecciones para el fenómeno de “La Niña” han mostrado un cambio significativo. Inicialmente, se esperaba una “Niña” fuerte, pero los modelos meteorológicos actuales indican una disminución en la intensidad de este fenómeno, según el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario. Esto sugiere que las lluvias y la humedad estarán más cerca de las medias estadísticas para la nueva campaña gruesa.

Evolución de las proyecciones de “La Niña”

En marzo de 2024, se alertaba sobre un nivel de enfriamiento proyectado para noviembre pocas veces visto en los últimos 25 años, con un valor de anomalía de temperatura superficial de -2,34°C. Este valor es significativo, ya que una anomalía inferior a -2 indica una “Niña” muy fuerte. Históricamente, los niveles más bajos de enfriamiento se registraron a finales de 2007 y principios de 2008 (-1,5 y -1,6) y a finales de 1999 y principios de 2000 (-1,7).

Sin embargo, las actualizaciones más recientes al 20 de mayo de 2024 muestran una significativa disminución del enfriamiento proyectado. Los nuevos modelos indican un valor de anomalía de -1,5°C para diciembre y enero, sugiriendo una “Niña” de intensidad fuerte/moderada en lugar de muy fuerte.

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Esta disminución en la intensidad de “La Niña” trae buenas noticias para la próxima campaña gruesa argentina. Según las declaraciones de Alfredo Elorriaga en una entrevista con TodoAgro, climatólogo de la Bolsa de Comercio de Rosario, el cambio en las proyecciones de “La Niña” y la neutralidad del índice del Dipolo Índico entre septiembre y octubre mejoran las perspectivas climáticas. Se espera que las lluvias y la humedad se mantengan cerca de las medias estadísticas, lo que podría evitar un escenario catastrófico para el agro en el ciclo 2024/25.

Las condiciones de “El Niño” están disminuyendo en el Pacífico ecuatorial centro-oriental, con indicadores oceánicos y atmosféricos alineados con condiciones neutrales. Los modelos pronostican una fase ENSO neutral entre mayo y julio de 2024, persistiendo durante el trimestre junio-agosto. “La Niña” se convierte en la categoría más probable entre septiembre 2024 y marzo 2025, aunque con una intensidad menor de lo inicialmente proyectado.

La evolución de las proyecciones meteorológicas indica una mejora en las perspectivas climáticas para la campaña gruesa 24/25 en Argentina. La disminución en la severidad de “La Niña” y las condiciones neutrales en el Pacífico son factores positivos que podrían estabilizar las condiciones de siembra y cosecha, alejándose de los escenarios adversos inicialmente previstos.