Barrera Sanitaria: Senasa prorroga 90 días la flexibilización ante el rechazo de la Patagonia

El Gobierno nacional decidió suspender y prorrogar por al menos 90 días la medida que flexibilizaba la barrera sanitaria del Río Colorado, luego de la fuerte oposición de las provincias patagónicas y de los productores agropecuarios. Este revés, confirmado a Infocampo tanto por fuentes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) como de la Mesa de Enlace, es el resultado de la presión ejercida por los gobiernos provinciales y el sector productivo, quienes manifestaron su preocupación por las posibles consecuencias de la flexibilización de la barrera sanitaria.
La normativa de Senasa sobre la barrera sanitaria para la ganadería
La medida, anunciada por el Senasa solo horas antes, generó un gran malestar en las provincias del sur del país, que temen perder su estatus de “zonas libres de aftosa sin vacunación”. Según los productores, esta flexibilización pone en riesgo los mercados internacionales, ya que cualquier aparición de aftosa podría generar un daño irreversible a la reputación de la carne argentina. Las autoridades del Senasa, que habían comunicado la medida de forma sorpresiva, confirmaron que están evaluando nuevos plazos para la implementación, a la espera de oficializar la prórroga en las próximas horas mediante un comunicado y la publicación de una nueva resolución sobre la barrera sanitaria en el Boletín Oficial.

El rechazo en las provincias patagónicas fue inmediato, especialmente en Tierra del Fuego, donde los productores señalaron el peligro que representa el transporte de ganado a través de Chile. Lucila Apolinaire, de la Asociación Rural de Tierra del Fuego, expresó que la medida podría paralizar el comercio de la isla en caso de un brote de aftosa, ya que Chile podría negarse a permitir el tránsito de ganado desde Argentina.
“Nos quedaríamos con los animales en Tierra del Fuego del lado argentino, sin poder salir”, advirtió Apolinaire. Además, subrayó que la flexibilización de la barrera sanitaria debería buscar “nivelar para arriba, no para abajo”, es decir, promover estándares sanitarios más altos en todo el país, y no reducir los requisitos en las zonas libres de aftosa.
Por otro lado, Francisco de Larminat, productor y cabañero de Tierra del Fuego, alertó sobre las consecuencias de permitir la flexibilización sin un protocolo adecuado. “Si aparece un solo caso en cualquier parte del país, nos arruina”, afirmó, refiriéndose a los efectos devastadores que tendría la propagación de una enfermedad en las provincias patagónicas, que dependen de su estatus sanitario para acceder a los mercados internacionales.
En su opinión, la medida beneficia a provincias como La Pampa o Buenos Aires, que buscan eliminar la barrera sanitaria para facilitar el comercio, pero a costa de poner en riesgo a toda la región patagónica.
El malestar entre los productores del sur del país también se refleja en la respuesta de las entidades rurales, que recibieron la información sobre la prórroga de la medida a través de las gobernaciones de las provincias afectadas, y no del Senasa ni del Gobierno nacional. La falta de comunicación y el hecho de que se haya tomado una decisión de tal envergadura sin consultar adecuadamente a los productores generó un gran malestar en el sector.

A nivel gubernamental, la decisión del Senasa fue criticada por los mandatarios de las provincias patagónicas, quienes advirtieron que esta flexibilización representa un retroceso en las políticas sanitarias del país.
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, calificó la medida como un “retroceso” en los esfuerzos por mantener el estatus sanitario de la región, y señaló que la Argentina debería avanzar en sus políticas de sanidad, en lugar de permitir que algunas provincias retrocedan. Según Weretilneck, las demás regiones del país deberían seguir el ejemplo de la Patagonia y lograr el estatus de “zona libre de aftosa sin vacunación”, en lugar de relajar las normas en las zonas que ya lo han alcanzado.
Mientras tanto, las provincias de Santa Cruz, Neuquén y Chubut anunciaron que presentarían un recurso de amparo en la Justicia para frenar la flexibilización de la barrera sanitaria.
La ministra de Producción de Chubut, Laura Mirantes, expresó su indignación por la forma en que se comunicó la medida, destacando que el sector productivo no fue consultado adecuadamente. “Nos enteramos por un portal nacional de una medida tan importante, lo considero una falta de respeto”, afirmó Mirantes, quien también subrayó que la decisión amenaza la competitividad de los productores de la región.
Este conflicto refleja las tensiones entre la necesidad de liberalizar el comercio de carne y la protección del estatus sanitario que garantiza el acceso a mercados internacionales. A pesar de la prórroga anunciada, el futuro de la barrera sanitaria y el estatus de las provincias patagónicas sigue siendo un tema de debate y conflicto.