Argentina mantuvo la exportación de carne en 70 mil toneladas
A diferencia de otros grandes países destacados en la exportación de carne a nivel global, Argentina enfrenta desafíos únicos que frenaron su capacidad de alcanzar nuevos récords en exportaciones. Estos desafíos se derivan de una combinación de factores internos, como el precio de la hacienda, el tipo de cambio, los impuestos a la exportación y las fluctuaciones en las cotizaciones internacionales. Aunque es difícil prever cómo se resolverá esta situación, el impacto es claro en los números de exportación.
La exportación de carne se mantiene estable
En julio de 2024, las exportaciones argentinas de carne alcanzaron 70.000 toneladas equivalentes a carcasa, una cifra que se mantuo constante durante los últimos cuatro meses. Esta estabilidad en los volúmenes exportados contrasta con las fluctuaciones observadas en otros mercados y refleja la compleja situación interna del país.
Los principales cambios en las exportaciones argentinas en relación a junio se manifestaron en una disminución de los envíos hacia algunos destinos clave. China, uno de los principales compradores de carne argentina, redujo sus importaciones en 7.500 toneladas equivalentes a carcasa (tec). También se registraron caídas en las exportaciones hacia Estados Unidos (1.600 tec) y Rusia (250 tec). Sin embargo, estas reducciones fueron casi completamente compensadas por incrementos en los envíos a otros destinos: Israel aumentó sus importaciones en 4.500 tec, Chile en 2.400 tec, la Unión Europea en 750 tec y Brasil en 250 tec.
Es destacable que, en los casos de Chile e Israel, estos países no habían importado un volumen tan grande de carne argentina en muchos meses, lo que representa un cambio positivo en su demanda. En el caso de Estados Unidos, aunque se registraron caídas, las exportaciones fueron excepcionales en comparación con la tendencia de mayo y junio.
A pesar de un panorama general de precios flojos, algunos destinos mostraron mejoras en julio. El enfriado hacia la Unión Europea (UE) experimentó un aumento del 1% en un mes y un 7% en comparación con el año anterior, siendo el único de los cinco principales destinos de exportación de carne argentina con un desempeño favorable. En contraste, los precios del congelado sin hueso hacia China cayeron un 1% mensual y un 9% anual. Otros mercados también registraron variaciones: el congelado hacia Israel subió un 2% mensual pero bajó un 3% anual, el enfriado hacia Chile disminuyó un 1% mensual y un 17% anual, y el congelado hacia Estados Unidos aumentó un 1% mensual pero cayó un 14% en comparación con el año anterior.
Al observar los promedios de precios de 2023, se destaca que solo el mercado europeo muestra un incremento del 12%. Israel, por su parte, se mantiene casi igual, mientras que los precios del enfriado hacia Chile y el congelado hacia Estados Unidos cayeron entre un 7% y un 8%, y los precios hacia China descendieron un 11%.
A pesar de algunas mejoras en julio, el promedio ponderado de precios con base fija de destinos mejoró solo un 1%, ubicándose aún en niveles bajos en comparación con años anteriores. En las últimas semanas, se observaron algunas subas en los precios de exportación hacia China, aunque estas son reducidas y podrían reflejarse en las estadísticas de agosto o septiembre. Además, se negociaron nuevos contratos con Israel que contemplan cotizaciones más altas, lo que podría ser un indicio de una leve recuperación.
En contraste, países como Brasil y Australia, que son los principales exportadores mundiales de carne, lograron marcar récords históricos en julio en términos de volumen exportado. Este desempeño relativamente pobre de Argentina pone de manifiesto las debilidades internas del país y no una crisis en el mercado mundial.
La alineación negativa entre el precio de la hacienda, el tipo de cambio, los impuestos a la exportación y las cotizaciones internacionales fue un obstáculo importante para un mejor desempeño del sector. Esta situación se prolongó durante varios meses y sigue siendo incierto cuál será la variable que permita superar esta coyuntura. En caso de que no se logre un cambio positivo, es probable que los volúmenes de exportación argentinos comiencen a disminuir aún más.
A pesar de estos desafíos, en los primeros siete meses de 2024, los embarques de carne argentina superaron en un 4% a los registrados en el mismo período del año anterior, lo que muestra que, a pesar de todo, el sector sigue resistiendo.
Con información de INDEC y ValorCarne