Agroalimentos: el consumidor pagó 3,6 veces más que el productor en noviembre
En noviembre, los precios de los agroalimentos experimentaron una brecha significativa entre el campo y la góndola, según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Durante el penúltimo mes del año, el consumidor abonó $3,6 por cada $1 que recibió el productor, mientras que la participación del productor en el precio final fue del 23,7%, mostrando una caída del 6,7% respecto a octubre.
Productores con menor participación en la cadena de valor
CAME destacó que la baja participación del productor en el precio final de los agroalimentos refleja una pérdida de rentabilidad en el primer eslabón de la cadena. Desde la entidad gremial-empresaria explicaron que “el consumidor continúa sin convalidar precios altos”, lo que se traduce en un impacto negativo para los productores.
El análisis reveló grandes diferencias entre los sectores: los productores de pollo mantuvieron la mayor participación en agroalimentos, con un 55,1%, mientras que los de naranja tuvieron la menor, con solo el 12,9%.
El informe de noviembre no registró problemas agroclimáticos significativos en la mayoría de las regiones productoras, salvo en algunos cinturones verdes, como Santa Fe. Esto permitió observar comportamientos dispares entre la canasta de frutas y la de verduras. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), las frutas aumentaron su precio en góndola, mientras que las verduras registraron una disminución promedio del 10%.
Brechas en agroalimentos
El IPOD frutihortícola, que mide la brecha en 19 frutas y hortalizas, se multiplicó por 5,8 veces en noviembre, representando un incremento del 13,7% respecto a octubre. En contraste, el IPOD ganadero, compuesto por cinco productos y subproductos de origen animal, registró una brecha de 2,9 veces, manteniéndose estable por sexto mes consecutivo de agroalimentos.
Entre los productos con mayor diferencia entre los precios de origen y destino se destacaron:
- Naranja y cebolla: 7,7 veces.
- Manzana roja: 7,1 veces.
- Lechuga: 6,4 veces.
- Zanahoria: 6,1 veces.
Por otro lado, los productos con menor brecha fueron:
- Pollo: 1,8 veces.
- Huevos: 2 veces.
- Frutilla: 2,7 veces.
- Leche: 3,3 veces.
- Calabaza: 3,1 veces.
La marcada diferencia en los precios pone en evidencia los desafíos estructurales en la cadena de valor agroalimentaria, donde el productor recibe una fracción reducida del precio que paga el consumidor. Esto plantea la necesidad de políticas y herramientas que favorezcan una distribución más equitativa, al tiempo que se fortalecen los mecanismos de control y transparencia en la comercialización.
La recuperación del sector dependerá de su capacidad para reducir estas disparidades, optimizar la logística y promover un consumo que reconozca el esfuerzo del primer eslabón productivo.