Aftosa en Eslovaquia: crece la preocupación en Europa por nuevos casos en el 2025

La fiebre aftosa sigue encendiendo alarmas en Europa. Luego de los casos confirmados en Alemania y Hungría, las autoridades sanitarias de Eslovaquia reportaron la detección de tres focos de la enfermedad en bovinos, lo que incrementa el temor por un posible brote a gran escala en el continente.
Expansión de la aftosa en Eslovaquia
Según informaron medios internacionales, la Administración Estatal Veterinaria y Alimentaria de Eslovaquia confirmó la presencia del virus en tres explotaciones bovinas: dos tambos y un establecimiento de producción de carne ubicados en el distrito de Dunajská Streda, en la región de Trnava, cerca de la frontera con Hungría.
Los primeros signos clínicos de la enfermedad se detectaron el 20 de marzo, lo que activó un rápido protocolo de acción. Las muestras tomadas a los animales fueron analizadas en el Laboratorio Nacional de Referencia, donde se confirmó la presencia del virus el 21 de marzo. Aún se está a la espera de la determinación del serotipo o topotipo del virus, según informó el Ministerio de Agricultura de España.

Medidas de contención y emergencia sanitaria
Ante la preocupante situación, el gobierno de Eslovaquia decretó el estado de emergencia sanitaria en todo el país tras la detección de otros dos nuevos focos de la enfermedad. Uno de estos casos se registró en Galanta, en el oeste del país, mientras que el otro fue reportado en Dunajská Streda.
Las autoridades han tomado medidas drásticas para evitar la propagación del virus. Entre ellas, se establecieron zonas de protección y vigilancia en un radio de tres y diez kilómetros alrededor de los focos detectados. Además, se ordenó el sacrificio preventivo de 1.400 cabezas de ganado y la paralización de todos los movimientos de animales susceptibles dentro del territorio eslovaco y hacia otros países. También se prohibieron concentraciones de animales y la venta de productos vacunos, con el objetivo de prevenir la expansión de la enfermedad a países vecinos como Polonia, uno de los principales productores de carne bovina de la Unión Europea.
El Ministerio de Agricultura de Eslovaquia estimó que los daños económicos causados hasta el momento por la fiebre aftosa ascienden a unos 10 millones de euros. La epidemia ha afectado hasta ahora a aproximadamente 2.800 cabezas de ganado vacuno, en un país que cuenta con una población bovina total de 400.000 animales.

Brotes en Europa: Alemania y Hungría también afectados
El brote de fiebre aftosa en Eslovaquia es el tercero registrado en Europa en los últimos meses. La preocupación en el continente comenzó en enero de este año, cuando Alemania reportó el primer caso de la enfermedad en casi 40 años. Este foco fue detectado en una explotación de búfalos cerca de Berlín, lo que llevó a la imposición de una zona de restricción de seis kilómetros alrededor del establecimiento. Se prevé que estas restricciones sean levantadas el próximo 11 de abril.
El pasado 7 de marzo, Hungría notificó la presencia del virus en un tambo ubicado en el municipio de Győr, próximo a la frontera con Eslovaquia. Los recientes casos reportados en territorio eslovaco están dentro de un radio de 25 kilómetros del foco húngaro, lo que genera preocupación por una posible conexión epidemiológica entre ambos países. Sin embargo, hasta el momento no se ha encontrado una relación directa entre los brotes en Alemania y Hungría, ya que se trata de cepas diferentes del virus.

La fiebre aftosa es una enfermedad altamente contagiosa que afecta a bovinos, ovinos y porcinos, causando fiebre y lesiones en la boca y las patas. Su rápida propagación puede generar graves pérdidas económicas y afectar el comercio internacional de carne y productos lácteos.
Las autoridades europeas continúan en alerta y han reforzado los controles sanitarios en la región para evitar una expansión mayor de la enfermedad. Se espera que en las próximas semanas se determinen nuevas medidas de prevención y contención, mientras los países afectados intentan mitigar el impacto del brote en sus respectivas industrias ganaderas.