Activos fijos: el 65% del campo argentino limita sus inversiones
Una encuesta reciente de la Universidad Austral revela que el 65% de los productores del campo no planea realizar inversiones en activos fijos en los próximos 12 meses. La incertidumbre económica y la falta de financiamiento están afectando las decisiones de inversión en el sector agropecuario argentino. Esta tendencia es preocupante para la reactivación económica, ya que uno de los principales motores de crecimiento en la economía argentina, la inversión en el sector agroindustrial, parece estar frenado por diversos factores macroeconómicos y de mercado.
Factores que afectan la inversión
El informe del “Ag Barometer Austral”, elaborado por el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, apunta a varios factores que están desincentivando las inversiones en el agro:
- Incertidumbre macroeconómica: Según el informe, el 20% de los productores menciona que la volatilidad de la economía dificulta planificar inversiones a largo plazo.
- Falta de financiamiento y costos elevados: Otro 20% de los encuestados cita la ausencia de líneas de crédito accesibles, y un 16% considera que los altos costos del financiamiento en el mercado local desmotivan cualquier tipo de inversión en activos fijos.
- Rentabilidad baja: La baja rentabilidad esperada para la campaña 2024/25, en parte por la caída de precios internacionales y la persistencia de derechos de exportación, hace que los productores prefieran esperar a un contexto más favorable antes de realizar inversiones.
- Clima adverso: Los riesgos climáticos, en particular la falta de lluvias y las sequías que afectan a varias regiones, también impactan en la disposición a invertir. Un 55% de los productores teme que las condiciones sean peores que las del ciclo anterior.
Carlos Steiger, investigador y director de la encuesta, explicó que, aunque las tasas de interés en pesos bajaron y los créditos en dólares son más accesibles, la rentabilidad proyectada para el ciclo 2024/25 sigue siendo baja, limitando el interés de los productores en proyectos de largo plazo.
Perfil de los productores que sí invertirán
Del 35% de los productores que sí planean realizar alguna inversión en activos fijos, la mayoría se enfoca en áreas específicas:
- Maquinarias grandes: Representa el 42% de las inversiones, ya que los productores buscan optimizar la eficiencia en la producción.
- Hacienda vacuna: Un 33% invertirá en ganado, especialmente en la cría, que mantiene su rentabilidad en ciertas zonas.
- Tierra: Con precios de compra relativamente bajos, el 23% de los productores optó por invertir en tierras como un activo estratégico.
- Otras maquinarias: Sembradoras y pulverizadoras son una prioridad para el 20% de los productores, quienes buscan mejorar la productividad en un contexto de bajos márgenes.
Altos costos de arrendamiento y caída en la confianza
Un aspecto crítico para el sector agropecuario es el costo de los arrendamientos, que representan una gran carga para los productores. La encuesta muestra que el 51% de los productores trabaja en tierras arrendadas y para el 76%, el alquiler significa el 40% o más de sus costos totales. Además, para el 48% de ellos, los arrendamientos superan el 50% de sus costos.
A esta carga se suma la caída de la confianza en el sector. Durante septiembre de 2024, el Índice de Confianza del Productor Argentino experimentó una baja del 5%, siendo la primera caída desde noviembre de 2022. La reducción más significativa se dio en el Índice de Expectativas Futuras, que descendió un 6%, mientras que el Índice de Situación Presente sólo cayó un 1%. Según el informe, las expectativas se vieron afectadas principalmente por la baja de los precios futuros de la soja para mayo de 2025, debido a una alta oferta proyectada y a un aumento en la relación stock/consumo global.
Perspectivas para el futuro
La encuesta de la Universidad Austral muestra que el contexto económico actual plantea numerosos desafíos para el sector agropecuario argentino. A pesar de la importancia de la inversión en la economía, la falta de confianza en el futuro del sector, combinada con la baja rentabilidad esperada, el alto costo de los arrendamientos y el acceso limitado a financiamiento, limitan la capacidad de crecimiento del agro en Argentina.
Para cambiar esta tendencia, el sector necesitaría un entorno macroeconómico más estable, con políticas que ofrezcan incentivos para la inversión y líneas de financiamiento accesibles. Además, la expectativa de una mayor superficie de soja para el ciclo 2024/25, impulsada por una reducción en la siembra de maíz, podría aliviar algunas presiones en el mercado y mejorar los márgenes de los productores. Sin embargo, la confianza sigue siendo frágil y el futuro del sector está marcado por la necesidad de estabilidad y rentabilidad para que los productores vuelvan a apostar por inversiones en activos fijos.